VIGO, 9 Feb. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del Real Club Celta de Vigo, Paco Herrera, ha asegurado tras la "dura" derrota 'in extremis' de su equipo ante el Valencia en Balaídos (0-1) que tenían que haber tomado el empate "como bueno", y que el resultado hace "un daño irreparable" al conjunto celeste.
"Por supuesto que sí, es una derrota bastante dura. Encima estás abajo y pierdes en los últimos diez segundos. Eso te hace un daño en principio irreparable; luego tienes toda la semana para preparar esos estropicios", aseguró el preparador catalán en rueda de prensa.
Herrera, que vio el partido desde la grada por sanción, indicó que el equipo tendría que haber valorado hacer bueno el empate. "Tenemos un partido menos y hay que valorarlo. El empate lo teníamos que tomar como bueno, no éramos capaces de hilvanar hacia arriba. Acababa todo al borde del área. Javi no ha hecho ninguna parada", afirmó.
Herrera quiso agradecer además el trabajo de los suyos, "No puedo ponerle ningún 'pero' al equipo en cuanto a trabajo y a intención. Les ha faltado más profundidad a la hora de hacer nuestro juego de ataque", indicó el míster celeste.
"Me quedo con el esfuerzo de los jugadores, con el buen trabajo, y lamento mucho la derrota porque deja al equipo descolgado", añadió.
El técnico del conjunto vigués reconoció que la lesión de Augusto Fernández y las molestias de Álex López trastocaron los planes de los locales. "Excepto en los primeros diez minutos de la primera parte, los 35 restantes hemos sido mejores, hemos atacado con sentido, pero nos falta intención de gol, de hacer jugadas bonitas. En la segunda parte hemos estado bien puestos, aunque cada vez nos costaba más llegar arriba. Sabe muy mal la lesión de Augusto, en banda nos estaba dando control de la situación, y que Álex -López- estuviese con molestias, porque estaba controlando y ayudándonos a hacer mejor fútbol", subrayó.
"Han metido por dentro a Albelda y Tino Costa, con dos centrales y gente fuerte y dura con contacto. En los contactos nos ganan, nuestro equipo es bajito y esa lucha desigual nos hace pagar el esfuerzo si el equipo no es capaz de controlar la pelota. Eso nos ha pasado", relató.
Por último, resaltó que a veces la ansiedad por eludir los puestos de descenso les pasa factura. "A veces la ansiedad del equipo puede hacer que te equivoques un poco más, esto les pasa a los equipos de media tabla para abajo. Las otras dos veces -con derrota en los últimos minutos- hemos salido y levantado la cabeza. El camino es bastante más éste que el de la semana pasada", concluyó.
