BARCELONA 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
El precandidato a las elecciones a la presidencia del FC Barcelona Jaume Guixà se refirió a la recalificación de la zona del Miniestadi, aprobada ayer inicialmente por el Ayuntamiento de Barcelona, y pidió un replanteamiento del proyecto ya que, según su parecer, debería esperarse seis meses hasta que se proclame al nuevo presidente blaugrana.
"El Ayuntamiento tiene que ser flexible y ver que no ha existido un consenso total entre los grupos municipales, los vecinos y los socios del Barça. Es evidente que se tendrá que reordenar la zona, pero en seis meses habrá un nuevo presidente en el FC Barcelona y, por lo tanto, la cuestión de la recalificación deberá replantearse entonces", señaló.
Guixà, que acudió ayer por la tarde a la comisión municipal de urbanismo del Ayuntamiento barcelonés para tratar este tema, se mostró dubitativo entorno a las cifras de dicha recalificación. "Los 68 millones de euros de beneficio es una cifra interpretable en función de lo que se acabe aprobando, aparte de que es mucho menos de lo que se esperaba y en términos futbolísticos sólo serviría para comprar un jugador de primera fila", aseguró.
Además, el precandidato criticó que el proyecto de recalificación no beneficiará a los vecinos de la zona. "El barrio no gana nada, ya que los nuevos equipamientos que se proyectan son necesarios para los vecinos que hay actualmente y con la reordenación llegaran 4.000 nuevos vecinos y por lo tanto estos equipamientos serán insuficientes para la zona", afirmó.