"Todavía no sabemos si es una recaída, habrá que esperar hasta mañana y veremos si tenemos que arrepentirnos mucho o poco"
LONDRES, 27 Dic. (EUROPA PRESS) -
El técnico del Arsenal, el francés Arsene Wenger, quiso mostrarse optimista sobre la lesión sufrida por el capitán Cesc Fábregas en la victoria (3-0) de su equipo esta tarde ante el Aston Villa y eludió referirse a si había sido demasiado arriesgado hacerle jugar.
Cesc, que llevaba sin jugar desde el pasado día 16 tras lesionarse ante el Burnley, fue hoy suplente, pero, con el 0-0 de su equipo ante el Aston Villa, saltó al campo en el minuto 57. El catalán revolucionó el partido, anotó de falta en el 65, y logró el 2-0 en el 81, momento en el que recayó de su lesión.
"Todavía no sabemos si es una recaída, habrá que esperar hasta mañana. Antes del partido sabíamos que no estaba en perfectas condiciones, pero veremos si tenemos que arrepentirnos mucho o poco. Creo que no es muy malo y él cree lo mismo, pero habrá que ver porque si vuelve a ser lo mismo serían unas tres semanas, si no estaría en unos días", advirtió.
Los 'gunners' deben jugar contra el Portsmouth el miércoles y West Ham en la copa el día 3, por lo que ausencia podría ser decisiva, pero Wenger considera que "nunca se sabrá" si el riesgo no mereció la pena. "Si me demuestran que podríamos haber ganado sin él, es que me equivoqué, pero es no podrá confirmarse nunca", expresó.
"Fui cauto, sé que en el centro del campo estaremos cortos si perdemos jugadores y más ahora que Alex Song se marcha para jugar la Copa de África, pero lo haría otra vez porque a veces hay que seguir el instinto", añadió.
El francés desveló que antes del partido ya sabía que "le pondría si era realmente necesario. Si hubiéramos ido 1-0 no lo habría hecho, pero se hace lo que se cree necesario para ganar un partido". justificó.
Por eso, recalcó que no se podía "predecir" qué habría pasado sin el capitán sobre el césped. "Él añade creatividad y en ese momento pensé que era necesario", sentenció.
