BARCELONA, 13 May. (EUROPA PRESS) -
El defensa del FC Barcelona Gabriel Milito fue operado hoy de una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha y también le intervinieron en la rodilla izquierda para extraerle una parte del tendón rotuliano con la que reconstruir el ligamento dañado, y estará entre seis y nueve meses de baja y no podrá jugar durante buena parte de la próxima campaña, como pronto hasta el mes de noviembre.
Milito realizará una primera fase de la recuperación, de cinco o seis semanas, en Barcelona, bajo el control del doctor Ramon Cugat, que dirigió la intervención a la que fue sometido hoy el jugador, y después viajará a Argentina para seguir el proceso en su país durante dos meses en que su evolución será supervisada por el médico de la selección argentina, Homero De Agostino.
Su regreso a Barcelona está previsto para el mes de septiembre y su vuelta a la competición se producirá en un plazo de entre seis y nueve meses, por lo que podría alargarse hasta "enero o febrero", según explicó el doctor Cugat, que también manifestó que la recuperación suele ser de unos seis meses, pero que, cuando se reconstruye un ligamento que ya se había roto en una anterior ocasión, "hay que ser más cauto".
Milito ya había sufrido una rotura del mismo ligamento en 2001, cuando era jugador de Independiente de Avellaneda, y esa misma lesión frustró su fichaje por el Real Madrid en 2003. Ahora, ha vuelto a romperse el ligamento debido a un mal gesto que realizó el pasado 29 de abril durante el partido ante el Manchester United en Old Trafford (1-0) que despidió al Barça de la Liga de Campeones.
Cugat reiteró que la lesión actual no tiene que ver con la anterior --"la prueba es que ha jugado siete años a un alto nivel"-- y también explicó que, en esta segunda operación, le intervinieron también la rodilla izquierda para extraerle una parte del tendón rotuliano de esa articulación, pese a que no estaba afectada, con la que reconstruir el ligamento dañado y que ello también puede alargar su recuperación.
El médico explicó que optaron por extraerle una parte del tendón rotuliano de la rodilla izquierda porque tiene más elasticidad que el de la rodilla lesionada y que esa parte del tendón, de nueve milímetros, se regenerará en el plazo de un año, aunque no le impedirá volver a jugar antes. Sin embargo, apuntó que suele ser esta rodilla la que causa mayores molestias en la rehabilitación.
El doctor Ramon Cugat, por otra parte, fue cuestionado por su posible fichaje por el Barcelona de cara a la próxima campaña, dentro de una reestructuración de los servicios médicos a petición del nuevo entrenador, Pep Guardiola, y rechazó la posibilidad de integrarse en el área médica del club, aunque mantuvo que siempre estará a su "disposición" para "colaborar" con los galenos del club, como ha hecho hasta ahora.
