MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los pilotos Carlos Sainz y Ana Carrasco y el ciclista Alejandro Valverde han sido condecorados este martes en la V edición de los Premios María de Villota y los VII Ciudad de la Raqueta, que pusieron su acento este año en el mundo del motor, y reconocieron al mundo del deporte en general.
Sainz, "muy agradecido" a la condecoración, dijo que "cada reconocimiento es una alegría". "Éste me hace una especial ilusión por la relación que tenía con María y la familia de Villota", añadió el bicampeón del mundo de rallys, que confirmó nuevamente su participación en el Dakar 2019 porque se sigue "divirtiendo".
Ana Carrasco, por su parte, aseguró que "ha sido un año increíble" para ella. "Es un sueño", dijo nada más recoger el premio. "María de Villota es un referente. Ella inició el camino que nosotras ahora continuamos", recordó la española.
Los Premios María de Villota reconocieron también la gran Hazaña Deportiva de Alejandro Valverde, campeón del Mundo de ciclismo a sus 38 años tras firmar una épica victoria el pasado mes de octubre en los Mundiales de Viena, mientras que Juan Carlos Ferrero fue distinguido en los Premios Ciudad de la Raqueta por toda su Trayectoria en el mundo del tenis.
Por su parte, el Barcelona Open Banc Sabadell, el histórico Torneo Conde de Godó, recibió el premio Evento Deportivo, y Horacio Alvarez Clementi, uno de los históricos y pioneros del pádel a nivel mundial, recibió el Premio Trayectoria Pádel.
El Premio Especial Ciudad de la Raqueta lo recibió José Luis Izquierdo, Mago More, mientras que la Fundación También vio reconocida su labor con el Premio Ciudad de la Raqueta en la categoría de Solidaridad; el periodista Lalo Alzueta fue distinguido con el Premio Ciudad de la Raqueta en la categoría de Comunicación Deportiva y Head recibió el Ciudad de la Raqueta en la categoría de Empresa.
El momento más emotivo de la noche fue el Reconocimiento In Memoriam que el Jurado de los Premios María de Villota y Ciudad de la Raqueta concedió a Celia Barquín, fallecida hace unas semanas en Estados Unidos. Su padre, Marcos Barquín, recogió el premio arropado por todo el mundo del deporte en una sala puesta en pie.
