MADRID, 29 May. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Central de Deontología del Consejo General de Colegios de Médicos (OMC) pidió hoy a los organismos deportivos y a los médicos del deporte a que presenten las denuncias pertinentes ante los Colegios de Médicos acerca de los casos de dopaje sobre los que tengan conocimiento.
Asímismo, instó a las Juntas Directivas de los Colegios a "asumir un papel activo y responsable" en la persecución del dopaje practicado por los médicos, y pongan que marcha los procedimientos disciplinarios colegiales para reprimirlo, "como práctica contraria a la ética y la deontología médicas".
La OMC, recuerda en un comunicado que "la participación del médico en tales prácticas es una violación inequívoca de la ética médica" y esa conducta antideontológica "se agrava cuando esas prácticas van ligadas a la obtención de beneficios económicos desproporcionados, pues entonces equivalen a una explotación cómplice de la vulnerabilidad de unos sujetos que, en unos casos se hacen ellos víctimas voluntarias de la sed de gloria o de dinero y, en otros, son objeto de explotación por firmas comerciales o por algunos directivos poco escrupulosos de organizaciones deportivas".
En este sentido, la OMC recuerda que se consideran prácticas de dopaje "gravemente peligrosas" los procedimientos que modifican los componentes de la sangre, el uso de medicinas o sustancias de cualquier naturaleza que alteran el sistema nervioso, ya sea estimulándolo, ya deprimiéndolo, las que inducen alteraciones del tono mental o de la combatividad, las que enmascaran el dolor o la fatiga, las que puedan modificar los rasgos asociados a la edad o a la configuración sexual, las que actúan o buscan un incremento del rendimiento competitivo mediante el aumento antinatural de la masa muscular o de la resistencia a la fatiga.
Porque, independientemente de sus implicaciones para la ética propia del deporte, los médicos recuerdan que el dopaje constituye una amenaza para la salud de los hombres y mujeres, en especial de los más jóvenes, que, como profesionales o aficionados, practican el deporte y "esa conducta choca con los principios básicos de la deontología médica" como reza en el Código de Ética y Deontología Médica, donde se señala que el médico nunca podrá perjudicar intencionadamente la salud de su paciente o someterle a riesgos desproporcionados.
La Asociación Médica Mundial y del Comité Permanente de los Médicos Europeos sobre la materia advierte de que los médicos han de oponerse a la práctica del dopaje y están obligados a informar a los deportistas de los efectos perjudiciales que los diferentes procedimientos de dopaje conllevan. "Y no podrán dar nunca por aceptable esa conducta antiética en sus colegas, sino que, por el contrario, están obligados, de acuerdo con las normas estatutarias y deontológicas, a denunciarlos ante las instancias colegiales", recuerda la OMC.
