Mavis Chirandu, de una aldea de Zimbabue a Río

Publicado: martes, 9 agosto 2016 16:15

MADRID, 9 Ago. (EUROPA PRESS) -

La futbolista zimbabuense Mavis Chirandu, que se enfrentará este martes a las 21:00 (horario peninsular español) ante Australia en la tercera y última jornada de la fase de grupos de los Juegos Río de Janeiro, ha cumplido "su sueño" de participar en unos Juegos Olímpicos con la selección de fútbol de Zimbabue.

Chirandu llegó a la Aldea Infantil SOS de Bindura siendo un bebé. Alguien la encontró en la carretera y la llevó hasta allí. No saben quién fue, pero todos le conocen como "el buen samaritano" y a Mavis le encantaría poder agradecerle la oportunidad que le brindó, la posibilidad de vivir en una familia que, según asegura, "no se diferencia en nada de aquellas en las que los niños viven con sus padres biológicos".

Tras un tiempo, Chirandu se convirtió en una niña inquieta que encontró en el deporte su refugio y su pasión. Al empezar la escuela se apuntó en el equipo Hermann Gmeiner y sus maestros y compañeros no tardaron en percibir su talento. "Me enteré de que era buena jugando al fútbol cuando tenía once años", confesó la futbolista a Aldeas Infantiles.

Con 17 años se unió al equipo nacional sub-17, los Mighty Warriors, y poco después se convirtió en su capitana. Viajaba todos los días a Harare, la capital zimbabuense, para entrenar. A menudo tenía que dormir en la sede del club porque se hacía demasiado tarde para volver a casa, a una hora de la capital.

En la actualidad, Mavis reside en Harare y juega en la primera división de fútbol femenino de su país. Ha participado en ocho campeonatos internacionales y su proyección no ha hecho más que empezar. Juega con pasión y determinación, y tiene claro que el esfuerzo y la dedicación son fundamentales para convertirse en jugadora profesional.

Este martes finalizará su participación en Río, tras haber perdido contra Canadá (3-1) y contra Alemania (6-1). "Es un ejemplo de superación y una inspiración para todas las niñas. Ha logrado sobresalir en un campo a menudo dominado por hombres y lo ha hecho con pasión y determinación. La felicitamos y admiramos por ello", admitió Edwin Magosvongwe, director de los Programas para Jóvenes de Aldeas de Zimbabue.