Federer elimina a Almagro y jugará en semifinales frente a Hewitt, verdugo de Moyá

Actualizado: sábado, 18 agosto 2007 2:01


CINCINNATI (ESTADOS UNIDOS), 18 Ago. (EUROPA PRESS) -

El suizo Roger Fereder finiquitó ayer las opciones de Nicolás Almagro en el Masters Series de Cincinnati, séptimo de la temporada, después de superarle en tres sets por 6-3, 3-6 y 6-2, confirmando así su pase a la ronda de semifinales, en la que se medirá al australiano Lleyton Hewitt, verdugo de Carlos Moyá.

Federer, cada vez menos intenso y arrollador, entregó la segunda manga a un luchador Nicolás Almagro, aunque no fue suficiente para que el murciano, que había perdido sus cuatro enfrentamientos anteriores con el suizo, pudiera sorprender al número uno mundial.

El helvético, aplicando de nuevo la ley del mínimo esfuerzo, basó su triunfo en la seguridad de su servicio, aunque Almagro se lo pudo robar en dos ocasiones, una de ellas clave para forzar el tercer set.

En el primero, Federer necesitó dos roturas para imponerse por 6-3 y en el tercero rompió de inicio el saque de Almagro y se situó con una ventaja de 3-0 que se dedicó a defender para cerrar su pase a semifinales por 6-2, en las que se medirá a Hewitt, quien anteriormente se había deshecho de Carlos Moyá por 6-2 y 6-4.

HEWITT ARROLLA A MOYÁ

Hewitt confirmó los precedentes entre ambos tenistas, cuyo duelo se había saldado de manera favorable al australiano en los últimos cinco enfrentamientos, y fue superior al balear, que sólo reaccionó en la segunda manga, pero era ya demasiado tarde.

Moyá no pudo seguir el ritmo del 'aussie' en un primer set que Hewitt bordó. El australiano, antiguo número uno mundial, secó al mallorquín desde la línea de fondo, con una gran derecha, y además estuvo especialmente preciso con su servicio.

El español no pudo ofrecer mayor resistencia y el vendaval de Hewitt se prolongó en la segunda manga con dos 'breaks' consecutivos que le situaron con ventaja de 4-0. Moyá encontró entonces la motivación suficiente para agarrarse al partido y rompió por primera vez el servicio del australiano, lo que le permitió estrechar diferencias (4-3).

Pero la reacción no pudo ser redonda porque Hewitt acertó a cerrar el partido al servicio por 6-4, y frenó la marcha de Moyá en Cincinnati, donde había demostrado un gran estado de forma.