"Ayer di una hora de rueda de prensa y no me hicieron ni una sola pregunta sobre Ferrer"
MELBOURNE (AUSTRALIA), 28 (EUROPA PRESS)
El tenista escocés Andy Murray afronta la final del Abierto de Australia, primer 'Grand Slam' del año, como "un sueño", ya que puede convertirse en el primer británico en 75 años en conquistar un 'grande' desde que lo lograra Fred Perry en el US Open de 1936.
"Para mí este partido es un sueño y un gran objetivo personal. No pienso mucho en la posibilidad de hacer historia. Pero obviamente quiero intentar ganar. Voy a dar el 110 por cien en la cancha, pero también tengo que estar en la cancha tranquilo y relajado", afirmó en rueda de prensa.
El de Dunblane calificó como "muy duro" su choque de semifinales ante el español David Ferrer y reconoció haber sufrido "altibajos". "He tenido que cambiar mi táctica en el segundo y tercer sets. Así que estoy muy contento por haber ganado un choque tan complicado", apuntó.
Para Murray la clave estuvo en que sacó "muy bien" en los dos 'tie-breaks'. "Eso suele marcar la diferencia en la 'muerte súbita'. En el tercer set estuve muy bien, no como en el primero, que jugué mal. Tuve ocasiones, pero no las convertí. Eso pasa cuando juegas a cinco sets ante alguien tan bueno como David (Ferrer)", añadió.
Además, se mostró sorprendido por la poca importancia que ha dado la prensa al de Jávea, aunque sí reconoció que la presión de jugar ante Ferrer es "diferente" a la de tener enfrente a Nadal o Federer.
"Ayer di una hora de rueda de prensa y no me hicieron ni una sola pregunta sobre Ferrer. Es el séptimo del mundo, después de esta semana subirá y eso choca. Yo le respeto igual que a todos. Hemos jugado muchas veces y siempre han sido partidos muy duros. Además, ahora está en un gran momento de forma", comentó.
"NO ME PREOCUPAN QUE NO ESTÉN NADAL O FEDERER".
De todos modos, dejó claro que fue un encuentro "difícil" y también destacó los cuartos ante el ucraniano Alexandr Dolgopolov. "Los dos últimos partidos han sido los más duros de mi cuadro porque no conocía el juego de Dolgopolov. El domingo también va a ser complicado", subrayó Murray.
Por otra parte, el escocés negó que la ausencia de los dos mejores del mundo reste calidad a la final. "La gente puede pensar que una final con Rafa y Roger es mejor, pero a mí no me preocupa. Para mí lo bueno es estar yo. Los dos han hecho cosas grandes para este deporte y seguirán haciéndolas los próximos seis o siete años o el tiempo que sigan en activo. Pero personalmente prefiero estar yo en la final que estar en casa viendo como juegan ellos", explicó.
De cara a la final del domingo ante "un buen amigo" como Djokovic, espera sacar provecho de su derrota del pasado año ante Federer. "Perder la final el año pasado fue duro para mí, pero me hizo mejor jugador y más fuerte mentalmente. Hay experiencias que debes pasar cuando estás en el nivel deportivo más algo. Es normal perder partidos duros. Pero espero que esa derrota me ayude el domingo. Creo que lo haré mejor", finalizó.