DESCONECTA, 12 Jun.
La sangre de James Harrison no es una sangre muy común. De hecho, es una sangre extraordinaria que ha servido durante años para salvar a millones de bebés en Australia, lugar donde reside. Allí se ha ganado el apodo del 'hombre con el brazo de oro' y es que ha llegado a realizar más de 1.000 donaciones a lo largo de su vida. Conozcamos más sobre su historia:
A la edad de 14 años, James Harrison tuvo una experiencia muy cercana a la muerte tras someterse a una cirugía mayor en el pecho para extirparle un pulmón, por la que necesito 13 litros de sangre.
Gracias a las donaciones de otras personas, Harrison consiguió salir airoso de ese bache. Entonces, sabedor de que la generosidad de sus donantes le había salvado la vida, se prometió a sí mismo que cuando cumpliese la mayoría de edad se convertiría en un donante de sangre activo. Y así fue.
El australiano, de 78 años, comenzó a donar sangre en 1954 y para sorpresa de los médicos su sangre contenía un anticuerpo inusual llamado Rho (D) Inmunoglobulina que puede combatir la enfermedad de Rhesus. Sabiendo esto, Harrison colaboró codo con codo con los médicos para desarrollar una inyección anti-D, aplicable a mujeres embarazadas para prevenir esta enfermedad.
La enfermedad de Rhesus hace que la sangre de una mujer embarazada ataque las células de sangre del bebé que está por nacer. Esto se produce cuando el factor de la madre es Rh NEGATIVO y el de la criatura Rh POSITIVO. Lo que sucede es que el sistema inmunitario de la madre detecta los glóbulos rojos de su hijo como extraños y desarrolla anticuerpos para destruir esas células.
Desde su primera donación hasta ahora, Harrison ha establecido su récord en 1000 donaciones de sangre que hace por generosidad absoluta. Su brazo está valorado en más de 1 millón de dólares australianos. Gracias a estas donaciones, su sangre ayudó a que millones de niños murieran antes de nacer.
La Cruz Roja australiana estima que, en total, ha llegado a salvar más de 2,4 millones de niños y mujeres, incluyendo a su propia hija Tracey. En Australia es considerado héroe nacional y por ello ha recibido numerosos premios.
