Actualizado 12/12/2016 13:28

Su familia le dejó plantado en su cumpleaños pero estos extraños lo celebraron con él

Su familia le dejó plantado en su cumpleaños pero estos extraños lo celebraron c
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EDIZIONES, 12 Dic.

"Hoy es mi cumpleaños. Cumplo 61 años. Arreglé las mesas y traje pastel porque quedé en verme con mi familia para celebrar mi cumpleaños. Esperaba que vinieran mis hijos, mis nietos y mi esposa, pero como verán nadie vino" - (a mí se me hizo un nudo en la garganta y hasta se me erizó la piel) - siguió - "por lo que les pido a quien quiera sentarse conmigo a celebrar mi cumpleaños y me canten las mañanitas se lo voy a agradecer infinitamente" - (se le entrecortó la voz - si me hubiera pasado a mi hubiera llorado amargamente).

Este es el relato que Patty Rodríguez compartió en Facebook sobre lo que había vivido el pasado domingo 4 de diciembre en el Café La Parroquia, en Veracruz, México. Ella junto a un acompañante habían acudido hasta allí para tomar un café cuando vio que un hombre pidió la atención de los allí presentes para decir unas palabras que terminaron por conmoverlos a todos.

café veracruz

A Patty este hombre le había llamado la atención desde el primer momento, pues era el único que estaba juntando mesas, poniendo serpentinas en las sillas, gorritos de cumpleaños y hasta había sacado un pastel. Parecía entusiasmado decorándolo todo hasta que recibió una llamada telefónica. En ese momento, cuenta Patty, que fue cuando se levantó y pronunció aquellas palabras que le conmovieron.

"Una señora se levantó y llevó su café. Mi acompañante y yo rápidamente también nos fuimos a celebrar su cumpleaños, le di un fuerte abrazo, al igual que una familia y una pareja más que nos sentamos allí con el señor Eduviges", contó Patty.

El señor Eduviges es originario de Chiapas y desde hace muchos años vive en Veracruz. Aquella tarde Eduviges estuvo acompañado de vecinos y desconocidos que le cantaron sus mañanitas.

café veracruz 3

"Lo que más me taladró fue oírlo decir que nadie tiene por qué suplicar amor", confesó Patty al final del relato y concluyó:

"Amemos a nuestra familia, estemos siempre presentes aunque no vivamos juntos, démosle tiempo".

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