EDIZIONES, 28 Mar.
Después de pasar 221 días en el Hospital Infantil de Boston, Ari Schultz, un niño de 5 años, recibió la mejor noticia que podía recibir: un nuevo corazón estaba en camino. Su reacción al enterarse de la buena nueva que ha estado esperando durante mucho tiempo es realmente conmovedora.
"He estado hablando con los doctores y me han dicho que han encontrado un corazón después de tanto tiempo y que es compatible contigo", se escucha decir a su padre, Mike Schultz, en el vídeo que recoge el momento y que ha sido compartido a través de la plataforma GoFundMe, donde la familia reúne fondos para costear la intervención. Una mezcla de sorpresa, miedo y nerviosismo se reflejan en el rostro del pequeño Ari en ese momento.
"¿Qué te parece?", le pregunta su padre. "¿Encontraron uno?", pregunta con incredulidad e ilusión el niño. "Sí, lo han hecho. ¿Qué piensas?", insiste el progenitor. "Genial, y ¿cuándo lo puedo tener?". "Tal vez esta misma tarde", le responde su padre. "Entonces, ¿podré ir a casa esta mañana?", se le escucha decir con la voz quebrada por la emoción.
La pregunta es lapidaria para unos padres que llevan velando mucho tiempo por la salud de su hijo, pero casi sin pensárselo mucho continúan con la conversación explicándoles parte del proceso que vivirá a partir de ahora. "Mamá y papá van a estar aquí contigo todo el tiempo", añadió Erica, la madre del pequeño. "Te queremos mucho".
Ari recibió su nuevo corazón hace tres semanas en el Hospital Infantil de Boston y durante un tiempo estuvo en la UCI cardíaca recuperándose de la intervención. "Está despierto, el tubo de respiración está fuera y está respirando por sí mismo", escribían Mike y Erica Schultz en el blog en el que actualizan el estado de salud de su hijo y todo el proceso. Pero, como ellos mismos sabe, Ari tiene un camino muy largo por delante hasta que su nuevo corazón se adapte a él y coopere.
De momento, y según las últimas actualizaciones, el proceso está siendo bastante duro y Ari ha sufrido varios rechazos, pero los doctores no se rinden. Es cuestión de tiempo que el cuerpo de Ari aprenda de su nuevo corazón y viceversa.
Le deseamos las mejores de las suertes.
