DESCONECTA, 20 Ene.
El piropo ("lisonja", requiebro" - RAE) es el método clásico y tradicional que ha formado parte de la cultura popular, habiéndose aceptado socialmente, como parte del cortejo amoroso. Sin embargo, su uso en la sociedad ha adquirido nuevos matices, algo vulgares, que han tergiversado su propósito original, que no es otro que ganar la voluntad de alguien con fines amorosos.
A pesar de ello, hoy en día siguen habiendo personas que hacen uso de los manuales clásicos, añadiendo pinceladas modernas y mucho humor a los piropos. Son estos piropos originales los que resultan más eficaces en un encuentro casual.
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El objetivo de mezclar humor y palabras bonitas provoca seguro una sonrisa instantánea, si no una carcajada, cuando el receptor lo escucha y eso propicia un acercamiento para entablar alguna relación mucho más que ir directamente al grano. ¿No creéis?
A los protagonistas de este vídeos, la táctica del humor y las palabras bonitas para decir piropos a sus 'víctimas' parece surtir el efecto deseado y terminan consiguiendo el contacto de la mayoría de ellas, con mayor o menor esfuerzo.
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