MADRID, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -
Las obras del túnel que canalizará el paso de la línea ferroviaria de Alta Velocidad (AVE) por Barcelona se adjudicarán el próximo viernes, anunció hoy la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega.
La adjudicación se abordará en un consejo de administración que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) celebrará ese día con carácter extraordinario.
La construcción de este túnel, presupuestado en unos 246,20 millones de euros, ha causado polémica en Barcelona dado que pasará cerca del templo de la Sagrada Familia de Gaudí.
La propuesta de adjudicación de esta obra estuvo previsto que se tratara en la reunión ordinaria del consejo de Adif de octubre del pasado año, pero finalmente quedó pendiente por los problemas surgidos días antes en el sistema ferroviario de la Ciudad Condal por las obras del AVE.
Sacyr Vallehermoso se perfilaba como favorito en la propuesta de adjudicación que entonces quedó pendiente. También competían el resto de las grandes constructoras cotizadas (ACS, Acciona, FCC, Ferrovial y OHL), además de Isolux Corsán, San José, Comsa y Rubau en distintos consorcios.
Según los términos con el que contrato salió a concurso, las obras del túneles contarán con un plazo de ejecución de 35 meses (dos años y once meses). Coincide así con el nuevo plazo dado que Fomento dio para la conexión AVE desde Barcelona hasta la frontera francesa, establecido para 2012, tres años después de la fecha inicial de 2009, por la complejidad técnica del trazado.
El contrato contempla la ejecución del tramo de 5,64 kilómetros que unirá las dos estaciones de tren de Barcelona. El trazado partirá de la actual estación de Sants para discurrir en túnel hasta la futura estación de La Sagrera.
Los primeros 422 metros y los últimos 395 metros del trazado se realizarán mediante el sistema de falso túnel entre pantallas, mientras que los 4,82 kilómetros restantes se construirán con tuneladora.
El trazado corresponde al acordado entre las tres administraciones (Ministerio de Fomento, Generalitat de Catalunya y Ayuntamiento de Barcelona) y con él, según aseguran, se consigue que el túnel no discurra bajo edificios en ningún punto de su recorrido, y lo haga siempre por la zona central de las calles y avenidas de L'Eixample.
PROTECCIÓN DE LA SAGRADA FAMILIA.
El contrato también incluye la ejecución de un tratamiento de protección para el tramo de túnel que pasa cerca del templo de la Sagrada Familia de Gaudí, para evitar que las obras le causen daño alguno.
En concreto, en el tramo de recorrido próximo al templo, con carácter previo al paso de la tuneladora, será preciso disponer una protección específica mediante una pantalla permeable de pilotes de 1,5 metros de diámetro y unos 40 metros de profundidad.
Con esta barrera se pretende asegurar que los movimientos del terreno generados por las obras de construcción del túnel no se transmitan al templo.
Además, se deberá construir un dado longitudinal de hormigón junto a la pantalla y mejorar el terreno mediante inyecciones de consolidación. Los procedimientos constructivos garantizarán también la seguridad e integridad del terreno y de los edificios situados en las proximidades.
