Del Rivero reitera que el grupo no pretende lanzar una OPA sobre la francesa Eiffage
MADRID, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
El grupo Sacyr Vallehermoso (SyV) ha solicitado cuatro puestos en el consejo de administración de la constructora francesa Eiffage, en la que controla más de un 10% de su capital, según confirmaron hoy a Europa Press en fuentes de la compañía.
Los propuestos para ocupar esos cuatro sillones del consejo de la gala son el presidente del grupo, Luis del Rivero; su consejero delegado, Manuel Manrique; el empresario y uno de sus principales accionistas Juan Abelló, y su director general, Vicente Benedito.
La eventual elección de estos consejeros en Eiffage, que actualmente tiene ocho miembros en su máximo órgano de gestión, constituye uno de los puntos del orden del día de la junta general de accionistas que la constructora francesa celebrará el próximo día 19.
No obstante, el presidente de Sacyr Vallehermoso, Luis del Rivero, eludió hoy pronunciarse sobre el número de consejeros que Eiffage le puede conceder en función de su participación.
Preguntado por la cuestión tras los desayunos informativos de Europa Press, sólo indicó que tendrá los representantes "que la asamblea diga". "En Francia se pueden pedir consejeros y la junta (de Eiffage) dirá lo que tenga por conveniente. Pero el buen gobierno es el mismo en todas partes", apuntó en referencia a las disposiciones legales francesas sobre la materia.
NO LANZARÁN OPA.
Del Rivero no se manifestó sobre la intención de la compañía a seguir elevando su participación en la gala, si bien reiteró que no va a lanzar una oferta pública de adquisición de acciones (OPA) sobre la constructora francesa. "Siempre hemos dicho que no vamos a lanzar OPA", apuntó.
En cuanto a su relación con el presidente de Eiffage, Jean-François Roverato, tan sólo apuntó que "habla mucho con él" y que le profesa una "gran admiración".
Sacyr alcanzó hace un mes una participación del 10% en Eiffage, sociedad en la que ya ha invertido 426,64 millones de euros y de la que es segundo máximo accionista por detrás del colectivo de empleados y donde, según la prensa gala, está próximo a alcanzar el 15%.
El grupo avanzó entonces su intención de continuar adquiriendo acciones de la sociedad para convertirse en accionista significativo de la compañía y emprender con ella un marco de colaboración, pero rechazó que pretenda tomar el control de la sociedad o lanzar una oferta pública de adquisición de acciones (OPA).
La legislación francesa no obliga a lanzar una OPA sobre una empresa siempre que no se supere el 33% de su capital social, frente al límite del 25% establecido en España.
