MADRID, 10 Nov. (EUROPA PRESS) -
El consejo de administración de Iberdrola está reunido en Bilbao de forma ordinaria, donde con toda probabilidad se analizará las posibilidades de inversión de la compañía, después de que en los últimos días haya hecho público su interés por el grupo energético británico Scottish Power, informaron a Europa Press en fuentes de la eléctrica.
Las mismas fuentes precisaron que los consejeros de la segunda eléctrica de España no tomarán una decisión definitiva en relación con posibles inversiones, puesto que la autorización o veto de esta inversión no está contemplada en el orden del día.
No obstante, ante la fuerte repercusión que ha tenido esta noticia en los dos últimos días, los miembros del consejo de Iberdrola hablarán de esta operación en un marco de estudio de las posibilidades de inversión de la compañía.
Por otro lado, las mismas fuentes explicaron que previsiblemente el consejo de administración de Iberdrola aprobará en esta reunión el dividendo a cuenta de la compañía.
Iberdrola informó hoy al regulador británico de la competencia, el Takeover Panel, de que estudia varias "alternativas de inversión", entre ellas una posible operación relacionada con la eléctrica Scottish Power.
"Iberdrola está encantado de anunciar que, con el objetivo de crear valor para sus accionistas, continúa valorando diferentes alternativas de inversión y oportunidades en el mercado, incluida Scottish Power", señala la compañía en el comunicado remitido al Takeover Panel.
En todo caso, como ya indicó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), advierte de que actualmente se encuentra "evaluando distintas alternativas de inversión, sin que por el momento se haya adoptado ninguna decisión o acuerdo tendente a realizar dichas inversiones estratégicas".
El miércoles, Scottish Power difundió un comunicado en el que decía haber recibido una muestra de interés que podría conducir o no a una oferta de compra. Esa misma tarde, fuentes de Iberdrola confirmaron el interés de la española por la eléctrica británica. De concretarse, la operación podría alcanzar un valor de unos 11.000 millones de libras (unos 16.200 millones de euros).
