MADRID/BILBAO, 25 Mar. (EUROPA PRESS) -
La junta de accionistas de Iberdrola decidirá mañana si la constructora ACS puede contar con un representante en el consejo de administración de la eléctrica o, como sostiene la dirección de la empresa, no puede hacerlo porque es competidor directo en el negocio de la energía.
Para dirimir este asunto y el resto de los incluidos en el orden del día, los accionistas se reunirán a las 11.30 horas en el Palacio Euskalduna de Bilbao. Las intervenciones correrán a cargo del presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán; del secretario, Julián Martínez-Simancas; del director económico-financiero, José Sainz, y del director de operaciones, José Luis San Pedro.
Según las fuentes consultadas, ACS, que estará representada por José Luis del Valle en la junta, hará uso de su derecho de representación proporcional y designará un consejero, que podría ser el miembro de la comisión ejecutiva de la constructora José María Loizaga o el consejero de ACS y ex presidente de Unión Fenosa, Pedro López Jiménez.
Tras ese momento, se conocerá de qué forma hace valer Iberdrola el argumento de que ACS es competidor y cómo maniobra para dejar sin efecto el nombramiento del vocal de la constructora. Si la eléctrica hace valer su posición, ACS no podrá consolidar proporcionalmente su participación del 12,7% en Iberdrola, para lo que necesita contar con un consejero o tener un 20%.
En todo caso, tanto Iberdrola como ACS han evitado desvelar su estrategia de cara a la junta. Ni siquiera Sánchez Galán quiso hacer comentarios sobre este asunto en la rueda de prensa celebrada ayer en Bilbao, en la que se ciñó al comunicado oficial publicado el martes por la eléctrica.
En este comunicado se dice que la decisión final corresponderá a los accionistas y se reconoce el derecho de Residencial Monte Carmelo (ACS) a tener un consejero, aunque se advierte de que los informes jurídicos dicen que la constructora es competidora.
SOLUCIÓN JUDICIAL.
Las fuentes jurídicas consultadas por Europa Press consideran que, al margen de si ACS logra o no mañana un consejero, el conflicto entre las partes está abocado a acabar en un juzgado mercantil, como ya ocurrió cuando Acciona intentó hace años entrar en el consejo de FCC.
Pese a evitar pronunciarse sobre el conflicto con ACS, Sánchez Galán sostuvo ayer que su compañía tiene un "proyecto industrial e independiente a largo plazo en defensa de los intereses de los accionistas" y que "quien quiera controlar la empresa debe lanzar una OPA por el 100%" y "en metálico".
Por su parte, el presidente de ACS, Florentino Pérez, ha reiterado el carácter "estratégico" que Iberdrola presenta para el grupo de construcción, y su "firme voluntad" de elevar hasta el 20% su participación en la eléctrica. "Iberdrola es una magnífica empresa por la que apostamos y seguiremos apostando", destacó en una presentación realizada a finales de febrero.
ENMIENDA DE LOS BLINDAJES.
La junta de mañana se celebra después de que el Congreso decidiera aplazar hasta el 6 de abril el debate y aprobación de la reforma de la Ley de Auditorías y Sociedades Anónimas, que incluye la enmienda socialista para prohibir las limitaciones de los derechos de voto en las empresas. La eléctrica tiene limitados al 10% los derechos de voto de sus accionistas, independientemente de la participación que ostentan.
El orden del día de la junta de Iberdrola incluye además el nombramiento de dos consejeros externos independientes, ajenos a ACS, y la renovación de otros siete vocales, incluido el propio Sánchez Galán.
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