MADRID, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -
La junta general de accionistas de Repsol YPF acordó hoy el pago de un dividendo de 0,6 euros por acción, lo que supone un aumento del 20% sobre lo abonado en 2005.
La petrolera hispano-argentina, que reunió hoy a sus accionistas, acordó también el nombramiento como consejeros independientes a Artur Carulla y Javier Echenique, que cubren las vacantes dejadas por Juan Molins y Enrique Aldama, así como la ratificación de Paulina Beato y Philippe Reichtul.
Según informa la compañía, la llegada al consejo en 2005 de estos dos nuevos consejeros, especialistas en el sector energético internacional, es fruto de la decisión de aumentar el número de consejeros independientes como una iniciativa más en materia de buen gobierno.
El presidente de la compañía, Antoni Brufau, repasó ante los accionistas los resultados de 2005, cuando obtuvo un beneficio neto de 3.120 millones de euros, un 29,2% más que el año anterior.
También explicó los capítulos más importantes del año como la revisión a la baja de las reservas estimadas de petróleo o la nacionalización de los hidrocarburos decidida por el Gobierno de Bolivia, país en el que está presente y donde está negociando los contratos de explotación.
Sobre esta cuestión, su presidente declaró: "Tengo confianza en que en Bolivia, un país joven y poco vertebrado, el juicio se impondrá. No tengo la sensación de que no nos quieren, ya que los problemas han sido más políticos y mediáticos que reales. Me gustaría creer que llegaremos a un acuerdo", afirmó.
Aún así, puntualizó que la empresa cuenta con "instrumentos jurídicos más que potentes" para defender sus intereses, en relación a la posibilidad de que la nacionalización de hidrocarburos termine en los tribunales internacionales.
Sobre la cuestión de las reservas, por la que fue preguntado, pidió "dejarlo atrás" y emplazó a los accionistas a que se fijen en "cómo se genera valor". "En Venezuela por ejemplo, tenemos menos reservas de petróleo pero más valor. Lo importante es la sostenibilidad y la generación de resultados en un mundo cada vez más complejo", declaró.
De esta manera, alabó la labor "de las más de 34.000 personas que trabajan para que el valor de Repsol crezca".
INTERVENCIONES DE LOS ACCIONISTAS.
Varios accionistas ejercieron su derecho a intervenir en la junta general, con un amplio abanico de opiniones y preguntas, desde los hechos de Bolivia, las reservas hasta las políticas sociales y medioambientales de la empresa.
Antoni Brufau destacó el dinero destinado por la empresa a la responsabilidad corporativa en 2005 que alcanzó los 1.000 millones de euros, con proyectos como la construcción de un hospital en Libia y otros "para colaborar en la mejora de la calidad de vida" de las sociedades donde opera la compañía.
"Compañías como la nuestra hacen bandera de la responsabilidad corporativa, porque si no lo hacemos perdemos", afirmó. Según Brufau, en Repsol están "dispuestos al diálogo permanente, en todos los sitios" en los que están presentes.
