MADRID, 25 Abr. (EUROPA PRESS) -
La asociación de consumidores Asgeco recuerda que la Comisión Nacional de la Energía (CNE) ha aprobado un informe en el que se concluye que los consumidores no tienen que pagar el coste de los derechos de acceso al cambiar su tarifa nocturna por la nueva modalidad de discriminación horaria.
En un comunicado, Asgeco dice salir al paso de la "alarma social y las dudas" que está suscitando el final de la tarifa nocturna. Para ello, recoge las conclusiones del informe de la CNE para informar de que el cambio de tarifa implica la firma de un contrato en el que figure la nueva potencia adquirida, que deberá ser decidida en todo caso por los clientes.
Además, indica que los usuarios que se acojan a la tarifa con discriminación horaria nocturna no deberán pagar derechos de acometida ni las cuantías que se les requieran relacionadas con los cambios o modificaciones de los equipos de control.
El informe de la CNE explica que Iberdrola está remitiendo a determinados consumidores, especialmente a los usuarios de tarifa nocturna, un escrito en el que comunica los cambios y en el que les aplica la máxima potencia contratada. Además, les cobra los correspondientes derechos de acceso, según Asgeco.
El regulador energético aprobó ayer trasladar a la Dirección General de Polítcia Energética y Minas, dependiente del Ministerio de Industria, las numerosas reclamaciones recibidas de consumidores acerca de la subida de la tarifa noctura de la luz.
Las asociaciones de consumidores denuncian que la modificación de la tarifa nocturna les obligará a pagar hasta un 44% más por la electricidad consumida por la noche.
Cerca de un millón de familias utilizan acumuladores de calor gracias a que la tarifa nocturna, más barata que la del resto del día, favorecía este sistema de calefacción.
Si bien la nueva tarifa amplía el número de horas 'valle' por la noche, en las que la electricidad cuesta menos que en las 'punta' diurnas, reduce al mismo tiempo el descuento para el usuario, que pasa del 55% actual al 47%.
Las nuevas altas en el sistema eléctrica se acogen desde el 1 de enero a la tarifa con discriminación horaria, al tiempo que los anteriores usuarios, que tenían contratada la tarifa 2.0., mantienen su tarifa, pero pagando el máximo de potencia contratada.
