La entidad prevé unos ratios récord en sus resultados anuales y mantiene sus planes de realizar compras en el extranjero
MADRID, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
Caja Madrid ha "prestado convenientemente" en el mercado interbancario los más de 4.000 millones de euros que ingresó con la venta de su participación del 9,3% en el capital de Endesa a Enel y Acciona, una operación que le ha supuesto unas plusvalías e 2.341 millones de euros, según explicaron hoy en fuentes de la entidad.
La caja de ahorros se encuentra "desbordada de liquidez" tras hacer efectiva esta operación, ya que no tiene "ninguna prisa por hacer ninguna inversión" con estos ingresos extraordinarios que, según indicaron las mismas fuentes, "dan tranquilidad para afrontar el futuro".
Tras recordar que la entidad no tiene "nada" expuesto al riesgo 'subprime', las fuentes de Caja Madrid subrayaron que la crisis de liquidez en el mercado interbancario "se está normalizando", pero dijeron que influye mucho "el día a día" y la información sobre qué entidades están afectadas. "La situación se normalizará, aunque estas turbulencias durarán todavía unos meses", sentenciaron.
Por otro lado, la caja subrayó que la plusvalía por la venta de Endesa no se refleja en los resultados de los nueve primeros meses del año presentados hoy, pero sí tendrá efecto sobre las cuentas anuales, en las que saldrán "unos ratios de record Guiness" por lo que la entidad presentará cuentas dobles para que quede reflejada de forma más clara la evolución de la actividad bancaria.
Sin embargo, destacó que la cuenta de resultados hasta septiembre sin la aportación de Endesa "es de una gran solidez". Caja Madrid logró un beneficio neto en los nueve primeros meses del año de 1.266,9 millones de euros, un 44,4% más.
Las mismas fuentes explicaron que la política de inversiones que se inició "en su momento" está siendo "muy productiva", y destacaron que se puso en marcha en un momento en el que los tipos de interés estaban bajando "de manera clara" y en el que había que diversificar la cartera.
HABRÁ COMPRAS EN EL EXTRANJERO.
Asimismo, Caja Madrid mantiene sus planes de "seguir creciendo" tanto en España, --donde planea abrir 300 oficinas hasta 2010, la mitad de ellas en la Comunidad de Madrid--, como en el extranjero, gracias a su actual situación de liquidez.
En este sentido, resaltaron que Caja Madrid "no va a comprar un ABN Amro", sino que busca entidades "de un tamaño razonable que permitan ir avanzando despacio en los mercados". Por ello, la entidad que preside Miguel Blesa continuará analizando las oportunidades que se presenten, y "si son interesantes" se plantearán a los órganos de gobierno de la caja.
