MADRID, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -
El profesor de Banca y Mercado de Valores de Esade Juan Ignacio Sanz ha advertido este lunes de que Grecia "no tiene capacidad de generación de recursos" y ha recordado que la economía helena se ha reducido en un 25% y "precisa de fuertes reformas estructurales y de un sistema impositivo moderno".
Tras el triunfo del 'no' en el referéndum celebrado ayer, el experto señala que la pelota ahora está en el tejado del Banco Central Europeo (BCE) y, en este sentido, destaca que hay que tener en cuenta "el agravio comparativo" entre las decisiones que éste tome y lo que ocurrió con Irlanda, Portugal o España.
"Entra en juego la 'Teoría del Concepto Moral': ¿Qué haces ante un estado en situación de incumplimiento? ¿Lo proteges y reestructuras la deuda o no? Imagina cómo verían los países ya recatados que se le permitiera a Grecia no atender a las condiciones que se le impusieran", ha advertido Sanz, al tiempo que ha alertado de que "existe un grave peligro de fractura entre la Europa del Norte y la del Sur".
Sobre un posible contagio a España, Sanz ha indicado que la situación del país "no es como hace tres años", ya que ahora el BCE tiene instrumentos económicos y financieros que, además de proteger a Grecia, "establecen cortafuegos que protegen y garantizan la deuda de los países europeos".
"No va a poder evitar las turbulencias, pero no se va a llegar a situaciones de alta tensión como hace tres años en las que la prima de riesgo española llegó a alcanzar los 650 puntos", ha afirmado el profesor.
LECTURAS DEL REFERÉNDUM
Por otro lado, Sanz ve "lógico" que el ministro griego de Finanzas, Yanis Varufakis, haya dimitido, ya que, a su juicio, "toca el relevo y una nueva etapa". Para el experto, la victoria del 'no' en Grecia tiene tres lecturas: "la política, la económica, y la geoestratégica".
"Desde el punto de vista de la primera, es un rotundo éxito, tanto a nivel interno como institucional europeo. Sin embargo, no lo es tanto desde el punto de vista económico. La situación que el país heleno vive estos días no depende tanto de la política como de la capacidad financiera del país", ha subrayado.
Desde su punto de vista, la solución a la crisis griega "no depende de la Troika, sino del presidente del BCE, Mario Draghi, de si va a abrir vías transitorias de financiación porque, de lo contrario, será un colapso absoluto".
En último término, el profesor de Esade habla de las consecuencias geoestratégicas, ya que Estados Unidos podría interceder y pedirle al BCE que intente encontrar una solución "porque la ubicación de Grecia es vital para los intereses americanos y, por extensión, de la OTAN".
