MADRID, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha afirmado este jueves que "no va a ser sencillo" pactar con la CEOE a cuánto equivale, en cómputo anual, la semana laboral de 37,5 horas.
En declaraciones a la prensa tras asistir a la intervención de la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, en los 'Desayunos Informativos de Europa Press', el líder de UGT ha revelado que sindicatos y patronales ya han mantenido su primer encuentro bipartito para abordar la reducción de la jornada laboral semanal, que el Gobierno quiere situar en 38,5 horas este año y en 37,5 horas en 2025.
Álvarez ha indicado que está sobre la mesa pactar con las organizaciones empresariales la reducción de jornada en cómputo anual, no semanal, y aunque cree que "no es tan difícil" ponerse de acuerdo en esto, sí que ve más complicado pactar a qué número equivaldría la semana de 37,5 horas en jornada anual.
"Es un tema del que hemos hablado y creo que no es tan difícil llegar a acuerdos. Otra cosa es llegar a acuerdos en relación a cuántas horas anuales representan las 37,5 horas, que no será tan sencillo, porque el cómputo anual depende cómo, da un resultado o da otro. Y, por tanto, este es un tema que, aunque puedas llegar a acuerdo o estés de acuerdo, seguramente requerirá debates más profundos", ha señalado.
En todo caso, el líder de UGT ha dejado claro que, en esta negociación con las patronales, no habrá un pacto "de tema a tema", sino un acuerdo "global" en relación a la reducción de la jornada a 37,5 horas comprometida por el Gobierno en su programa político. "No vamos a tener un acuerdo hoy, otro mañana y otro pasado", ha subrayado.
Posteriormente, en declaraciones a la prensa tras reunirse con la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, el líder de UGT ha recordado que en la última reunión que los agentes sociales mantuvieron con el Ministerio de Trabajo, se le planteó "explícitamente" al Gobierno la necesidad de que la reducción de jornada se abordara en primera instancia entre sindicatos y empresarios.
"Hemos tenido una reunión y no hay ningún acuerdo. En esa reunión hemos empezado a hablar y efectivamente hay una cuestión en la que tenemos que profundizar y continuar hablando: si el cómputo va a ser semanal o va a ser anual. De hecho, casi todos los convenios colectivos tienen cómputo anual, pero de ahí a llegar un acuerdo, que nosotros queremos que sea del conjunto de la aplicación de las 37,5 horas, estamos lejos", ha explicado.
Álvarez ha señalado que por ahora sólo se ha celebrado una reunión bipartita, que ha sido "extraordinariamente positiva" y donde ha habido "sintonía" con las patronales, aunque ha afirmado que se va a tener que hacer un "gran esfuerzo" para que finalmente la implantación de la jornada de 37,5 horas se haga con acuerdo y consenso con la CEOE.
"Con acuerdo y con consenso, suma. Sólo los sindicatos es mucho más complejo. Esto hay que llevarlo a los convenios colectivos y además, tenemos que conseguir, sobre todo, que las pequeñas y medianas empresas tengan mecanismos para que, en ningún caso, esto perturbe el desarrollo del trabajo en las empresas. Por lo tanto, tenemos que continuar hablando", ha añadido.
DÍAS LIBRES O REDUCCIÓN DE HORAS
Preguntado por si la aplicación de la reducción de jornada se podría traducir, por ejemplo, en días libres en lugar de reducir horas semanales, el líder de UGT ha apuntado que "en algunos sectores se va a poder hacer así, pero en otros no".
"Por eso creemos que es un tema que tenemos que hablar en el marco de los convenios colectivos e incluso dejar una puerta abierta a que se pueda conciliar en las empresas, porque los convenios colectivos en general afectan a medianas y pequeñas empresas, a veces también a algunas grandes, y es evidente que no son las mismas necesidades las de una empresa del sector servicios que tenga dos o tres trabajadores que otra que tenga 20 ó 30", ha subrayado.
El líder de UGT ha instado a quitar "dramatismo" sobre la reducción de la jornada laboral, pues es una medida que "puede ser muy positiva" y que, además, iría en sintonía con la de otros países europeos.
"En toda la Unión Europea la jornada de trabajo es mucho más baja que la media que tenemos en España y por eso los países no son menos competitivos, sino al contrario. O sea, trabajar más horas no quiere decir que seamos más competitivos. Trabajando menos horas se puede ser igual o más competitivos", ha concluido.
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