Mejora cuatro décimas su puntuación gracias al control del gasto público y a la mayor libertad monetaria y de inversión
MADRID, 10 Mar. (EUROPA PRESS) -
España ocupa el puesto 49 en materia de libertad económica, la misma posición que ostentaba el año pasado, pese a que su puntuación ha mejorado cuatro décimas, según el Índice de Libertad Económica 2015 elaborado por The Heritage Foundation y The Wall Street Journal y presentado este martes en un acto organizado por la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES).
Este índice, que se publica desde 1995 y que en esta edición ha analizado a un total de 178 países, mide el impacto de la libertad económica y el libre mercado en función de cuatro factores: Estado de Derecho, tamaño del Gobierno, eficacia reguladora y apertura de los mercados.
La puntuación obtenida por España en esta ocasión se ha situado en 67,6 puntos, frente a los 67,2 puntos de la edición anterior. Aunque se trata de una tímida mejora, de sólo cuatro décimas, es el primer incremento que se produce en el índice de libertad económica de España tras tres años de descensos.
Este avance de la libertad económica en España se ha debido a las mejoras registradas en seis de los diez elementos que conforman los cuatro factores analizados por este indicador, entre ellos la libertad de inversión, la libertad monetaria y el control del gasto público. Por el contrario, ha empeorado la libertad fiscal y la libertad frente a la corrupción.
Con una puntuación de entre 60 y 70 puntos, como la obtenida por España, una economía se considera "moderadamente libre". Además de España, otros 54 países del estudio, entre ellos, Portugal, Francia, Bélgica o Croacia se encuentran también dentro de este rango.
Estos países ofrecen entornos institucionales en los que las personas y empresas privadas se benefician de al menos un grado moderado de libertad económica en lo que respecta a la búsqueda de una prosperidad y un éxito mayores.
RÉCORD DE LIBERTAD ECONÓMICA EN EL MUNDO.
En general, teniendo en cuenta los resultados de los 178 países analizados en el informe, el índice muestra un incremento de la libertad económica en todo el mundo por tercer año consecutivo, tras alcanzar los 60,4 puntos sobre un total de 100, su puntuación más elevada desde que comenzó a elaborarse este indicador, hace 21 años.
España se sitúa así por encima del promedio mundial, aunque muy lejos de los países "libres", que muestran puntuaciones superiores a los 80 puntos, y a cierta distancia de los países considerados "mayormente libres" (entre 70 y 80 puntos).
De los 178 países analizados, sólo Hong Kong, Singapur, Nueva Zelanda, Australia y Suiza se sitúan en el rango de países económicamente "libres", al obtener puntuaciones de 80 puntos o más. Otros 30 países han sido clasificados como economías "mayormente libres", entre ellos Estados Unidos, Canadá, Japón, Alemania, Reino Unido, Dinamarca o Suecia.
EL 65% DE LA POBLACIÓN VIVE SIN LIBERTAD ECONÓMICA.
Según los autores de este índice, el aumento de la libertad económica en el mundo se ha debido fundamentalmente a la mejora de la libertad comercial, la monetaria y la libertad frente a la corrupción.
No obstante, pese al progreso global registrado en las últimas dos décadas, el 65% de la población mundial, es decir, dos de cada tres personas, viven sin libertad económica, una proporción "perturbadoramente alta". Más de la mitad de estas personas viven sólo en dos países: China y la India.
Hong Kong se ha mantenido en esta edición como la economía más libre del mundo, distinción que ha logrado durante 21 años, aunque Singapur le ha comido mucho terreno y apenas se encuentra a dos décimas de darle alcance.
Destaca la subida de tres puestos lograda por Estonia, que se ha convertido en la octava economía más libre del mundo. Canadá permanece en sexta posición y Estados Unidos sigue en el puesto 12.
"Aquellos países que tienen mayor nivel de libertad económica tienen un desempeño sustancialmente superior al resto en crecimiento económico, ingresos per cápita, atención médica, educación, protección del medio ambiente, reducción de la pobreza y bienestar en general", ha destacado el director de Economía de FAES, Miguel Marín.
Por su parte, el director de la Oficina Económica de Presidencia del Gobierno, Álvaro Nadal, ha hecho un repaso de los avances logrados por la economía española en los últimos años gracias a las reformas estructurales, destacando el "salto" que ha dado España en sus exportaciones, con un crecimiento desconocido en el mundo de su capacidad exportadora, superior al 30%.
Nadal ha subrayado que la economía española se va a beneficiar de la depreciación del euro, del precio del Brent y de la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE), que debería ayudar a España a poner "un poco más orden" sus tasas de inflación.
En este sentido, ha indicado que lo lógico es que el IPC de España se mueva entre el 0% y el 0,5%. En otro orden de cosas, Nadal ve "deseable" que sindicatos y empresarios renueven el pacto de convenios "con la misma mentalidad" que mostraron en el anterior acuerdo, vigente hasta 2014.
