MADRID, 31 May. (EUROPA PRESS) -
El Consejo General de Economistas (CGE) mantiene su previsión de crecimiento de la economía española en el 2,1% para este año, a pesar de la mejora de los indicadores, debido al "complejo" entorno exterior, ante la desaceleración del ciclo, la política de Trump o el Brexit. Sin embargo, ha elevado en dos décimas, hasta el 1,9%, su pronóstico de crecimiento para 2020.
Así se desprende de su último Observatorio financiero, correspondiente al mes de mayo, y ha sido presentado en un acto que ha contado con la presencia del presidente honorario del Centre for Economic Policy Research (CEPR) de Londres, presidente del Observatorio del Banco Central Europeo y ex secretario de Estado de Economía, Guillermo de la Dehesa.
El presidente de la Comisión Financiera del CGE, Antonio Pedraza, ha explicado que se mantiene la previsión de crecimiento de la economía para 2019 en el 2,1%, a pesar de la mejora de los indicadores y de la mayor estabilidad interna, debido al "complejo entorno exterior, motivado fundamentalmente por la guerra comercial entre China y Estados Unidos".
Asimismo, ha destacado que el consumo, la construcción y el turismo siguen ganando peso en el PIB, si bien el consumo privado viene perdiendo dinamismo y podría desacelerarse en los próximos trimestres, con una estimación de un crecimiento del 1,9% este año.
A ello se suma que el consumo público, que viene creciendo a un ritmo del 3%, "puede que no siga siendo un elemento compensador, debido a las exigencias del control del déficit, que se harán más patentes en el segundo semestre de este año".
En cuanto al empleo, el CGE prevé que la tasa de paro baje al 14% este año, en tanto que mantiene su previsión de IPC en el 1,9% también.
De cara al 2020, los economistas han elevado en dos décimas, hasta el 1,9% su previsión de crecimiento de la actividad económica, con una tasa de paro prevista del 13,25% y una inflación del 2,1%, en tanto que el consumo continuaría creciendo, aunque a menor ritmo (+1,6%).
CRÉDITO Y RETOS DEL SECTOR BANCARIO
Por otra parte, el observatorio subraya que la financiación al sector privado en España sube 1,5% interanual al final del primer trimestre -desciende el destinado a vivienda (-1,0%) y aumenta un 3,9% el destinado a otros fines-. Dentro de las actividades productivas, cede construcción y servicios de forma considerable, aumentando en agricultura y comercio, y también, levemente, transporte.
Asimismo, avisa de que la banca "no ha terminado su reconversión", ante retos como los requisitos regulatorios, el escenario de tipos, la resistencia a subir comisiones, la digitalización y sus costes, el exceso de dimensión y la competencia de otros operadores como las 'startups' y 'fintech'.