Economía.- Junta de Andalucía habla por primera vez de "crisis", aunque los efectos serán "menos dramáticos"

Actualizado: miércoles, 25 junio 2008 17:26

SEVILLA, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -

El vicepresidente segundo y consejero de Economía y Hacienda, José Antonio Griñán, habló hoy por primera vez de "crisis" como forma de calificar la situación económica actual "para que nadie se enfade", si bien advirtió de que los efectos "serán menos dramáticos" que en épocas anteriores.

Durante su intervención en la mesa redonda en Sevilla sobre '25 años de relaciones laborales y diálogo social', organizada por el Consejo Andaluz de Relaciones Laborales (CARL), donde fue invitado como ex ministro de Trabajo y Seguridad Social, Griñán señaló que España ha tenido que realizar cambios de forma "más deprisa" al empezar "más tarde", de ahí "el cambio en los últimos 22 años en la estructura económica, social y demográfica".

Destacó que se "está superando la situación con superavit" y, por lo tanto, "se afronta la situación con consolidación fiscal" algo que es diferente, según apuntó, a 1993 cuando "se vivía un enorme deterioro fiscal que no permitía enfrentar la situación como ahora".

Así se refirió a las declaraciones realizadas ayer por el secretario de Estado de Hacienda y Presupuestos, Carlos Ocaña, quien señaló que el Estado registró hasta mayo un superávit de 2.722 millones de euros en términos de Contabilidad Nacional (el 0,24% del PIB) frente al excedente de 13.592 millones obtenido en el mismo periodo del año anterior, lo que supone una reducción del 80 por ciento del superávit del Estado hasta el mes de mayo.

Por su parte, el que fue ministro de trabajo en 1980, Salvador Sánchez-Terán (UCD), calificó en declaraciones a los periodistas anteriores a la mesa redonda la situación como "crisis profunda", a lo que añadió que es "más de lo que se está diciendo" y que "afecta al sistema financiero, a varios sectores y al consumo de las familias".

Asimismo, llamó la atención sobre la situación y señaló que "va a costar superarla", por lo que pidió "políticas estatales y económicas mas fuertes y más duras de lo que se han planteado", entre ellas, apuntó a un aumento de la inversión pública, a la reducción del gasto público --"más fuertemente de lo que se ha anunciado"-- y evitar los fraudes en la Administración, "sobre todo --añadió-- en el desempleo".

Además de estas medidas que "ayudan a paliar la crisis aunque no a resolverla", añadió la necesidad de "hacer más obra social con gran contenido de mano de obra". Por último, precisó que "todos deben asumir la responsabilidad de la situación y ser corresponsables en la solución".

Por su parte, el que fue ministro de Trabajo en 1996, Manuel Pimentel (PP), destacó que "esta crisis ha pillado al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, con el pie cambiado", a lo que añadió que "no ha encontrado su sitio y da sensación permanente de cierta improvisación".

Finalmente, en declaraciones a los periodistas señaló que esto "tendrá un costo importante para el conjunto de la sociedad española y para el propio Gobierno", a lo que añadió que el próximo presidente del Gobierno será Mariano Rajoy.