Dice que vigilará que llegue el crédito a familias y pymes y que algunas empresas están usando la temporalidad para recortar plantilla
MADRID, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, emplazó hoy a empresarios y sindicatos a cerrar "en el menor tiempo posible" un acuerdo para la reforma y modernización de los servicios públicos de empleo (antiguo Inem) y para la renovación de cara a 2009 del Acuerdo Interconfederal de Negociación Colectiva (ANC).
Zapatero, que intervino en la inauguración de una conferencia empresarial organizada por la CEOE para buscar soluciones a la crisis, aseguró que la intervención de los agentes sociales siempre es positiva, pero subrayó que para que resulte "verdaderamente fructífera" debe producirse en el menor tiempo posible.
En este punto, se mostró convencido de que en "poco tiempo" se llegará en el marco del diálogo social a un acuerdo para la reforma de los servicios públicos de empleo, la mejora de la intermediación laboral y la modernización de las políticas activas de empleo, lo que, según dijo, permitirá abaratar los costes de reclutamiento de las empresas, incrementar las oportunidades de acceso al empleo y reducir el tiempo de ajuste en el mercado laboral.
"El diálogo social tiene que ser útil, no sólo para la defensa de los legítimos intereses de los interlocutores sociales, sino también para la sociedad en su conjunto para las personas en desempleo, y tiene que ser especialmente útil en estos momentos", enfatizó el presidente, antes de reconocer que le consta que estas preocupaciones "están en la cabeza" de sindicatos y empresarios.
Zapatero, que empezó su intervención con un recuerdo "emocionado" a la última víctima de ETA, el empresario vasco Ignacio Uria, y al fallecido José María Cuevas, dijo tener además la "plena convicción" de que los agentes sociales renovarán un año más el pacto de convenios, del que dijo que ha tenido una importancia "considerable" en la creación de un marco estable para la política salarial y la creación de empleo.
En este sentido, y tras expresar su pleno respaldo a la renovación de este acuerdo, el jefe del Ejecutivo destacó que "hoy es más necesario que nunca aportar cuantos elementos sean posibles para crear confianza" a familias y empresas. "Espero poder contar pronto con ese acuerdo, que irá en beneficio de todos", añadió el presidente, que expresó su convicción de que los empresarios saben valorar las ventajas del diálogo social, la eficacia de los acuerdos que emanan de él y la paz social que conllevan.
VIGILANTES CON LA FINANCIACIÓN.
Durante su intervención, en la que repasó algunas de las 80 medidas que ha adoptado su Gobierno para impulsar la recuperación económica y el empleo, el presidente se mostró dispuesto a conocer las propuestas empresariales para conseguir que el crédito llegue a familias y empresas cuanto antes, y, ante las demandas empresariales de que se acelere la financiación, dijo que él "es el primer interesado y el que más desea" que ello se produzca en el menor tiempo posible.
No obstante, señaló que las medidas del Gobierno tienen que seguir unos procedimientos para su aplicación, al tiempo que recordó que los recursos públicos que están detrás de las iniciativas dirigidas a impulsar la liquidez son de un "extraordinario volumen" y han salido de los bolsillos de todos los ciudadanos.
En cualquier caso, Zapatero garantizó que el Ejecutivo estará "vigilante" para que la financiación alcance a familias y empresas, especialmente a las pymes, y se mostró convencido de que estas medidas serán "visibles" en un "breve periodo de tiempo". Además, animó a los empresarios a hacer uso de la línea ICO para circulante a partir del 23 de diciembre, fecha de su puesta en marcha.
El presidente explicó que el mundo está viviendo su "primera crisis verdaderamente global" y que la economía española ha sido "muy sensible" a este escenario por ser muy abierta y por su dependencia de la financiación exterior. A ello se le ha unido el ajuste del sector inmobiliario, del que dijo que habría sido "menos doloroso" si no se hubiera producido la crisis financiera.
USO DE LA TEMPORALIDAD PARA AJUSTAR PLANTILLAS.
La situación, en definitiva, es que la economía española ya ha registrado su primera caída de actividad desde 1993 y que la tasa de paro está sufriendo mucho el deterioro. En ello, precisó el presidente, no sólo está influyendo la destrucción de empleo en la construcción sino también las prácticas de algunas empresas con dificultades que utilizan la "alta" temporalidad para ajustar "rápidamente" sus plantillas.
Zapatero reconoció que las previsiones apuntan a una recesión global, pero subrayó que España no puede conformarse con este diagnóstico y resaltó que todos los países están reaccionando globalmente a la mala situación económica.
En cualquier caso, recordó que todas las previsiones se equivocaron al predecir el ritmo de llegada de la crisis y confió en que "vuelvan a equivocarse" en la fecha que prevén para su finalización. "No es infrecuente que se equivoquen, como tampoco es infrecuente que vuelvan a proponer recetas que no se han demostrado eficientes", puntualizó.
