Economía/Macro.- La Cámara de Comercio de Barcelona confía en la obra pública para sustentar la economía española

Actualizado: martes, 19 febrero 2008 15:03

Reclama la creación de una oficina ejecutiva para controlar los proyectos y obras en la red de Cercanías de Barcelona

BARCELONA, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Cámara de Comercio de Barcelona mostró hoy su confianza en el desarrollo de la obra civil en los próximos meses para sustentar la economía española dentro de un proceso de desaceleración que, según el presidente de la entidad empresarial, Miquel Valls, no implicará un caída drástica del crecimiento económico, sino una "moderación" que se traducirá en un crecimiento del 2,8%.

En una rueda de prensa para presentar las propuestas de política económica de la institución de cara a las elecciones generales del 9 de marzo, Valls explicó que el sector que está sufriendo más la desaceleración económica es el de la construcción residencial, por lo que reclamó también una mayor apuesta de la Administración para la promoción de vivienda protegida.

En este sentido, valoró positivamente las medidas tomadas por el ejecutivo catalán incluidas dentro del Pacto Nacional de la Vivienda y que incluyen la reserva de suelo para la construcción de viviendas protegidas.

Con todo, señaló que esto no será suficiente para paliar la recesión en el sector y apostó por que las compañías dedicadas a la construcción residencial se adapten a la situación actual y reorienten su negocio hacia actividades como la obra pública o la rehabilitación y reforma de edificios.

Sobre la primera opción, destacó que Catalunya está inmersa en el máximo momento de licitaciones públicas del periodo 2000-2008, e insistió en que este ritmo inversor se debe mantener más allá de la celebración de las elecciones generales, puesto que la "resaca postelectoral" acostumbra a comportar una caída de la licitación y adjudicación de obra pública.

En cuanto al sector de la rehabilitación y reforma de edificios, Valls reclamó al Gobierno que revise el IVA que se paga por estas actividades, puesto que actualmente es el más alto de la Unión Europea (del 16%), y que lo coloque en torno al 7%, como en el resto de países de la UE.

MEJORA DE LAS INFRAESTRUCTURAS.

Por otro lado, aseguró que una mayor inversión en la obra pública también debe suponer una mejora de las infraestructuras, en especial las de transporte, las energéticas y las hidráulicas, con el objetivo de resarcir el déficit inversor acumulado desde hace años, y mejorar la competitividad catalana.

En relación a las infraestructuras energéticas e hidráulicas, pidió la definición de actuaciones a corto y largo plazo, la aplicación de tecnologías de ahorro de agua en la agricultura y la coordinación con otras políticas sectoriales para la mejor gestión del agua, y la apuesta por la energía nuclear, la mejora de la distribución eléctrica y la simplificación de los trámites en infraestructuras, para un nuevo modelo energético.

Respecto a las infraestructuras de transporte, Valls reclamó el control de la ejecución y el coste, aumentar la dotación de los recursos humanos, la simplificación de los trámites y la gestión conjunta de los proyectos con alta repercusión.

En este sentido, solicitó la creación de una oficina ejecutiva que se encargue de desarrollar y llevar a cabo los proyectos y las obras de la red ferroviaria de Cercanías en Barcelona.

Este organismo deberá estar formado por entidades estatales como el Ministerio de Fomento o Adif, por entidades encargas de obras en la red ferroviaria en Catalunya como la Sociedad Estatal de Infraestructuras del Transporte Terrestre, y por la Generalitat de Catalunya.

Entre las funciones de este organismo figura la coordinación del desarrollo de sus proyectos con otras infraestructuras como la Alta Velocidad o las líneas de Ferrocarrils de la Generalitat o el Metro de Barcelona, y también reducir las molestias para los viajeros y los vecinos que sufren la construcción de estas obras.

REFORMAS FISCALES.

Además de propuestas para la promoción de obra pública y la mejora de las infraestructuras, Valls reclamó reformas fiscales como la rebaja del tipo nominal del Impuesto de Sociedades del 30% al 25% y la deflación del 2% de los tipos impositivos de los mínimos familiares y personales y de las deducciones.