Economía/Macro.- Fernández Ordóñez replica al Gobierno que la inflación también está en su "ámbito de influencia"

Actualizado: martes, 24 junio 2008 15:07

MADRID, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -

El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, dio hoy un toque de atención al Gobierno para que trate de atajar el repunte de la inflación, pese a que éste tiene un origen externo a la economía española.

"El origen externo del episodio inflacionista al que estamos asistiendo no debe llevarnos, sin embargo, a considerar esta evolución como algo fuera del ámbito de influencia de las autoridades y de los agentes sociales", precisó durante su comparecencia cuatrimestral ante la Comisión de Economía y Hacienda del Congreso.

Además, Fernández Ordóñez consideró que "los intentos de eludir las pérdidas de renta real que el encarecimiento de los precios y costes comporta puede terminar generando mayores tensiones inflacionistas y afectar negativamente a la creación de empleo", lo que, añadió, "tendería a intensificar y prolongar el ajuste de la economía".

Por ello, el gobernador del Banco del España volvió a advertir de que mantener una senda de moderación de los márgenes empresariales y los salarios resulta más importante, si cabe, en una coyuntura como la actual, en la que "la competitividad constituye un elemento crucial".

En cualquier caso, el gobernador del Banco de España advirtió de que el incremento del IPC hasta niveles superiores al 4% en los últimos meses, arrastrado por el encarecimiento del petróleo y otras materias primas, está "desalentando el consumo" y "mermando su confianza".

Respecto al crecimiento de la economía, Fernández Ordóñez vaticinó "una etapa de moderación" y reconoció que "las incertidumbres que rodean a este escenario central son mayoritariamente a la baja y procedentes, sobre todo, del exterior".

Con todo, Fernández Ordóñez consideró que el saneamiento de las cuentas públicas "ha permitido que se pueda afrontar la desaceleración de la actividad desde una posición en la que los estabilizadores automáticos pueden desplegar su potencial anticíclico".

Sin embargo, en su opinión, "debe evitarse la aplicación de políticas discrecionales que puedan agotar el margen de maniobra al que podría ser necesario recurrir".