Economía/Macro.- El Gobierno francés se da dos años para lograr el objetivo de equilibrio presupuestario

PARIS 12 Nov. (EUROPA PRESS) - El primer ministro francés, François Fillon, aseguró hoy que el Gobierno no abandonará el objetivo de alcanzar el equilibrio presupuestario y que intentará no posponerlo "más de un año o dos".

En una entrevista con los lectores que hoy publica el diario 'Le Parisien', Fillon defiende la necesidad de "continuar conteniendo el gasto, congelarlo al nivel de años precedentes" a la espera de pasar "el periodo más agitado de la crisis" para luego volver a crecer y, gracias a los ingresos, reducir el déficit.

Recordó, asimismo, que el Gobierno tiene una previsión de crecimiento de entre el 0,2% y el 0,5 % para este año y que Francia se acerca a un crecimiento cero pero evitó hablar de recesión al resaltar la importancia de "usar las palabras que se corresponden con la realidad".

"Hablar de recesión cuando no la hay es minar inútilmente la moral de empresas, consumidores y agravar psicológicamente la situación", dijo. Fillon confió en que la economía gala no entre en recesión en 2009 pero advirtió que "nadie puede garantizarlo porque nadie puede saber a qué ritmo se recuperará la economía mundial".

El jefe del Ejecutivo galo admite que, con unas previsiones de crecimiento a la baja, habrá menos ingresos y que el Gobierno ha decidido disminuir de manera global los gastos del Estado casi un 0,5% respecto a la previsión inicial, por lo que la diferencia se financiará "con algo más de déficit".

"Otra opción hubiera sido bajar el gasto de manera más violenta. En ese caso el Estado se arriesgaba a ampliar la crisis económica y ser uno de los actores de la recesión, por lo que se descartó esa idea", explica Fillon.

En cuanto a la posibilidad de aumentar los impuestos, se descartó por la misma razón, dado que a su juicio disminuiría el poder adquisitivo de los franceses y su capacidad para invertir en las empresas. De ahí que lo único que quedara fuera el déficit.

"No es satifactorio, pero lo que cuenta es contener el gasto. Si dejamos que se desvíe se hace prácticamente imposible el objetivo de volver al equilibrio, incluso cuando se recupere el crecimiento", argumenta.