BRUSELAS, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Partido Socialista Europeo (PSE) dijo hoy que el plan de recuperación presentado por la Comisión es insuficiente para reactivar la economía y evitar la destrucción de puestos de trabajo. Por su parte, el grupo popular en la Eurocámara señaló que las propuestas de Bruselas constituyen "una caja de herramientas adecuada para hacer frente a la actual crisis económica".
El presidente del PSE, Poul Nyrup Rasmussen, dijo que el plan del Ejecutivo comunitario tiene "dos defectos importantes". El primero es que, a juicio de los socialistas, un estímulo fiscal del 1,5% del PIB como contempla Bruselas no es suficiente para mantener bajo el nivel de paro. "Nuestros cálculos dicen que se necesita al menos un 1% del PIB anual durante tres años para mantener el desempleo en los niveles actuales", señaló en un comunicado.
El segundo defecto, según Rasmussen, es que la canciller alemana Ángela Merkel y otros líderes conservadores como el italiano Silvio Berlusconi "podrían descafeinar el plan y negarse a realizar las inversiones nacionales necesarias". "Hay una posibilidad real de que Europa se quede atrás como consecuencia de la escala y la velocidad de los paquetes de reforma y estímulo de la nueva administración de EEUU", alertó el líder del PSE.
Por su parte, el presidente del grupo popular en la Eurocámara, Joseph Daul, celebró que la Comisión haya dado prioridad a la coordinación entre las instituciones comunitarias y los Estados miembros. Daul dijo que su familia política "hará todo lo posible para garantizar que esta coordinación se lleve a la práctica".
"Para mi grupo, la prioridad debe ser proteger a los ciudadanos europeos de los peores efectos de la crisis económica", insistió el presidente del grupo popular, que se mostró convencido de que con estas medidas se puede evitar una "espiral recesiva".
APOYO CON MATICES DE LA PATRONAL
Por su parte, la patronal europea BUSINESSEUROPE expresó su apoyo al plan de recuperación y pidió a los Estados miembros que se comprometan a aprobar medidas de estímulo fiscal que supongan al menos el 1,2% de su PIB en 2008 e incluso más en el caso de los países que puedan permitírselo.
Además, los empresarios pidieron iniciativas urgentes para garantizar que las compañías puedan tener acceso a la financiación en condiciones asequibles y un aumento en la facilidad financiera de la UE para ayudar a los Estados miembros con mayores dificultades, como Hungría o Letonia.
"Necesitamos un compromiso claro por parte de los Estados miembros de poner en marcha paquetes de estímulo económico de al menos el 1,2% de su PIB. Las medidas deben estar bien dirigidas para estimular la inversión pública y privada a corto plazo y deben coordinarse para producir el máximo resultado para la economía de la UE", dijo el presidente de la patronal, Ernest-Antoine Seillière.