MADRID 17 Dic. (EUROPA PRESS) -
La tasa de inflación interanual de la eurozona se mantuvo estable en el 2,1% el pasado mes de noviembre, lo que supone una revisión de una décima a la baja de la estimación preliminar de Eurostat, publicada el pasado 2 de diciembre, con lo que la subida de los precios en la región se mantiene próxima al objetivo de estabilidad a medio plazo del 2% fijado por el Banco Central Europeo (BCE), que mañana celebrará su última reunión de 2025.
Para el conjunto de la Unión Europea, por su parte, la tasa de inflación interanual en noviembre fue del 2,4%, una décima inferior a la subida del coste de la vida en octubre entre los Veintisiete.
Según los datos de esta segunda lectura de Eurostat, el coste de la energía en la eurozona registró en noviembre un retroceso interanual del 0,5% tras haber caído un 0,9% el mes anterior, mientras que el de los alimentos frescos aumentó un 3,2%, en línea con el mes anterior y una décima menos de lo estimado inicialmente.
De su lado, los bienes industriales no energéticos se encarecieron un 0,5% interanual, una décima menos que en octubre y que la primera estimación del dato, mientras que el coste de los servicios se vio incrementado al 3,5% desde el 3,4% de octubre.
Al excluir del cálculo el impacto de la energía, la inflación de la zona euro se mantuvo en el 2,4%. La tasa subyacente, que además de los precios de la energía deja fuera del cálculo también a los alimentos, el alcohol y el tabaco, repitió en noviembre en el 2,4%.
Las tasas de inflación anuales más bajas se registraron en Chipre (0,1%), Francia (0,8%) e Italia (1,1%), mientras que las mayores subidas de los precios correspondieron a Rumanía (8,6%), Estonia (4,7%) y Croacia (4,3%).
En comparación con octubre de 2025, la inflación interanual disminuyó en doce Estados miembros, se mantuvo estable en cinco y aumentó en diez.
En el caso de España, el alza de los precios en el penúltimo mes del año fue del 3,2%, en línea con la subida del mes anterior, lo que mantuvo sin cambios en nueve décimas el diferencial de precios desfavorable respecto de la zona euro.