MADRID, 6 Dic. (EUROPA PRESS) -
El gigante de los dibujos animados Disney ha anunciado un cambio relacionado con su política de RSC, y que implica que no permitirá que sus personajes se asocien con cadenas de comida rápida o 'fast food' que no cumplan determinados requisitos nutricionales.
Siguiendo con esta línea, la compañía anunció en un comunicado que "sólo se asociará con estas marcas para la comercialización de alimentos en los casos en los que el contenido graso de sus productos sea menor al 30% del total de las calorías y en los que el azúcar no exceda el 10% de las calorías totales".
Además de esta nueva medida, Disney está realizando "importantes esfuerzos" para introducir alimentos más sanos en las máquinas espendedoras y restaurantes de sus parques de ocio y atracciones en respuesta a la cada vez mayor obesidad infantil.
La nueva política de Disney establece así un claro apoyo a largo plazo a los alimentos y las promociones dirigidas a niños de forma tal que sus personajes comiencen a asociarse con una dieta "más saludable y equilibrada". Esta política "no busca excluir a ciertas marcas o restaurantes de sus parques infantiles, sino simplemente dejar de lado algunos alimentos no saludables", puntualiza el comunicado.
Pese a ello, el pasado mes de mayo Disney terminó con un contrato de más de una década de exclusividad con la cadena de restaurantes McDonald's porque afirmaron estar "descontentos" al verse ligados a una marca que estaba en el 'punto de mira' cuando se hablaba de obesidad infantil.
En palabras del presidente y CEO de Disney, Robert Iger, "la empresa y sus personajes están en una posición única para promover la comida que los niños y jóvenes querrán comer, y sus padres se sentirán bien dándosela".
Las nuevas medidas anunciadas por la compañía comenzarán a ponerse en práctica primero en Estados Unidos y paulatinamente a nivel internacional.
