RSC.- La EPA dedicará más de ocho millones de euros a la protección de las playas estadounidenses en 30 Estados

Actualizado: lunes, 9 enero 2006 17:53

MADRID, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -

La Agencia de Protección Medioambiental de Estados Unidos (EPA) dedicará 10 millones de dólares (8,2 millones de euros) a los programas de control de calidad del agua de las playas, para un total de 30 Estados.

Durante los pasados seis años, la EPA ha aportado más de 34 millones de euros en el marco de la Ley sobre la Evaluación Ambiental de las Playas y la Salud Costanera de 2000 (BEACH, por sus siglas en inglés) a los Estados con litorales a lo largo de las costas oceánicas de Estados Unidos y alrededor de los Grandes Lagos.

"Mientras la mayoría de nosotros no piensa en ir a pasear en la playa durante el mes de enero, estos fondos asegurarán que las familias estén mejor protegidas cuando pasen sus vacaciones este verano", declaró el administrador de la EPA, Stephen L. Johnson.

"Estas subvenciones son una parte integral del Plan de Playas Limpias de la Administración para mejorar la calidad del agua y mantener al público informado", agregó.

El control del agua de las playas ayuda a identificar las acciones necesarias para reducir la contaminación, con advertencias o incluso el cierre de las mismas cuando las concentraciones bacterianas alcancen niveles insalubres.

Asimismo, la EPA está trabajando con nuevas tecnologías que brindan resultados de controles más rápidos a fin de permitir que las agencias de salud locales determinen más rápidamente si una playa debe ser abierta al público.

Los fondos están disponibles para aquellos estados y territorios costeros y se otorgarán en base a los periodos de duración de las respectivas épocas playeras, las millas de playas de dichos estados y territorios, así como el número de personas que suelen utilizarlas.

Además, los fondos estarán disponibles para que las tribus indias elegibles también puedan solicitarlos. Las subvenciones que abarcarán un periodo de cinco años serán otorgadas a principios de este año y deberán ser solicitadas a través de una petición formal.

La Ley BEACH de 2000 exige que los estados y territorios costeros adopten criterios sobre patógenos actualizados para proteger a las personas que visiten sus playas de las bacterias dañinas.