RSC.- El Sindicato CNTG se felicita por la generalización de la afiliación de los trabajadores en Guinea

Actualizado: viernes, 27 abril 2007 14:08

Pese a los avances, sus responsables alertan de que la situación debe mejorar aún, y "el verdadero trabajo comienza ahora"


MADRID, 27 Abr. (EUROPA PRESS) -

La secretaria general de la Confederación Nacional de Trabajadores de Guinea (CNTG), Rabiatou Diallo, aplaudió el aumento en la afiliación a los sindicatos de los trabajadores del país, señalando que "hoy, todo el pueblo de Guinea está sindicalizado".

En una entrevista concedida al Boletín de la COnfederación Sindical Internacional (CSI), Diallo señaló que Guinea "se va reponiendo poco a poco de las huelgas y manifestaciones de hace tres meses, que fueron violentamente reprimidas". Los sindicatos guineanos consiguieron que se designara un nuevo Gobierno y algunos progresos en el plano social, como por ejemplo, una disminución de los precios de los productos de primera necesidad.

Diallo, que acaba de ser elegida vicepresidenta del Comité Femenino de la CSI y fue una de los artífices de estos movimientos de protesta, recuerda las represión que sufrieron los sindicalistas en esos momentos, aunque también se refiere a la esperanza de un futuro mejor para los trabajadores guineanos, "pero más especialmente para las trabajadoras".

A su juicio, "el verdadero trabajo comienza ahora", porque hay elementos que están "muy arraigados" en el país, como la corrupción, la impunidad y el engaño. "No será fácil cambiar el sistema", alerta. Según el protocolo que se firmó en marzo de este año, el Gobierno debería reestructurar toda la Administración para mejorarla, pero también debe reactivar la economía guineana y encontrar una solución para la inflación de la moneda.

El Gobierno debe además revisar todos los convenios del sector minero, que se firmaron "de cualquier manera", según Diallo, que recuerda que la vida diaria de los guineanos está plagada de dificultades. "No tenemos agua potable ni electricidad, los servicios de atención médica y de enseñanza están muy mal, los hospitales no tienen suficiente equipamiento, etc". En Guinea "hay que hacer casi todo de nuevo", apunta.

Sin embargo, los sindicatos tienen ahora mucho respaldo de la población, según dijo, porque se identifica con sus reivindicaciones. "El pueblo estaba cansado", --agrega--, de la mala repartición de los recursos y de que una minoría sacara provecho de la situación en detrimento del resto.

A pesar de los principios de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDAO) sobre la libre circulación de personas y de bienes, los sindicatos han reclamado que se bloquee durante un año la exportación de los productos alimentarios de primera necesidad dada la situación excepcional de Guinea, donde ya no se podía encontrar nada.

'ORGULLO' SINDICAL

Desde que se bloquearon esas exportaciones, la gente está en mejor situación, pero el poder adquisitivo de los trabajadores "sigue estando por los suelos", aunque en el mercado "ya se puede comprar pescado, carne, verdura y fruta y eso es un avance".

De la misma forma, y ante la falta de empleo, los jóvenes sobre todo habían formado asociaciones y esos grupos ahora se vuelcan hacia los sindicatos, en los que confía. "Todos quieren afiliarse y la gente se enorgullece de tener un carné sindical", recalca Diallo.

En la economía informal, ya antes algunos trabajadores se habían afiliado a sindicatos, pero en estos últimos meses "se afiliaron muchísimos más". "Y en las empresas donde no se toleraba una presencia sindical, los trabajadores reaccionaron y reclamaron que se formara un sindicato", matiza. Lo mismo está sucediendo en el extranjero, como en Bélgica, donde los guineanos se están agrupando y afiliándo a sindicatos belgas que trabajan con los sindicatos guineanos.

En su opinión, en este momento, el sindicalismo "no es tan sólo un movimiento reivindicativo", sino que participa en el desarrollo del país. Los sucesos de estos últimos meses han sido un éxito para el movimiento sindical nacional, africano e internacional y todos contribuyeron a esta victoria, "pero ahora comienza el verdadero trabajo y hay que hacerlo".

Así, se refirió al proceso de reconstrucción para reforzar el diálogo social, la gobernanza y la democracia, "un paso lógico en la salida de la crisis".

Durante los sucesos violentos y los meses de mayor represión Rabiatou Diallo fue herida de bala y golpeada, y todavía arrastra problemas de salud debido a las agresiones y sus propiedades, como una plantación cercana a su domicilio, fueron quemadas. "Hacía años que trabajábamos en esa plantación junto a mi marido y mi familia", señala Diallo, de 48 años y madre de siete hijos.

Rabiatou Diallo es una de las pocas mujeres que ocupan un cargo de secretaria general en el mundo sindical, lo que la CSI considera "una lucha" porque a las mujeres "se les margina". "Se las utiliza en la producción, pero cuando se pasa a hablar de responsabilidades, se nos relega a segundo plano", coincide Diallo.

"Queremos que esta situación cambie, por eso luchamos, pero no es cuestión de lloriquear, sino que, para reclamar nuestros derechos, hay que estar en el terreno, es necesario que se vea que actuamos", recalcó.

"Estoy muy orgullosa de que en África las cosas avancen --concluyó--, y no solamente en teoría. En su sindicato la participación de mujeres es ya del 50% con respecto a los hombres.