MADRID, 13 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Aerolíneas Argentinas, Mariano Recalde, ha acusado al grupo español Marsans, dueño de la aerolínea hasta su expropiación por parte del Gobierno argentino, de haber "vaciado" las arcas de la compañía aérea y de haber "robado" bienes de la empresa durante su gestión.
"La gestión privada no fue ineficiente, sino muy eficiente en el plan que trazó (Marsans) de vaciar Aerolíneas Argentinas para transferir todos los recursos, 'know how' y valores de la empresa hacia Marsans y concretamente hacia Air Comet y hacia sus agencias de turismo", recalcó Recalde en declaraciones a Radio Mitre.
En este sentido, el presidente de la aerolínea destacó que Marsans fomentó el desarrollo de sus empresas en Argentina "hasta el punto de que vaciaron los locales e instalaron en todo el país, que antes no existían, las agencias de Marsans".
"Se robaron bienes de la empresa para trasladarlos al grupo Marsans, partiendo de las agencias de turismo y pasando por repuestos, material aeronáutico y aviones", insistió Recalde.
Así, el presidente de Aerolíneas Argentinas defendió el primer año de gestión estatal, que "hizo bastante" y "mejoró muchísimo" los indicadores de la compañía. "Durante el año de gestión estatal se avanzó en la estatización y en la pelea para desplazar a los que tenían un plan claro de vaciar Aerolíneas Argentinas", puntualizó.
En cuanto a los resultados de la compañía, Recalde apuntó que pierde una media de 33 millones de dólares (23 millones de euros) mensuales, aunque la facturación "depende del mes".
En cuanto al déficit, según el presidente de Aerolíneas Argentinas podría situarse en 200 millones de dólares (139 millones de euros), a pesar de que el diario 'La Nación' adelantó la semana pasada que se podría situar en 300 millones de dólares (209 millones de euros).
Recalde recordó que en la temporada de invierno argentina (junio y julio) se produjo un fuerte descenso del turismo en el país, que se vio además afectado por la gripe A. Esto, sumado a la recesión económica internacional, provocó que los ingresos de la compañía se redujeran por la mitad, pasando de 90 millones de dólares (62 millones de euros) en julio de 2008 a unos 50 millones de dólares (35 millones de euros) en el pasado mes.
MENOS DÉFICIT CUANDO PASE LA CRISIS
Sin embargo, el presidente de Aerolíneas Argentinas confió en que cuando pase la crisis se eleve "bastante" la facturación, lo que unido a una reestructuración del gasto y a un aumento de la eficiencia permitirá "reducir mucho" el déficit.
A dicho descenso contribuirá, según Recalde, la renovación de la flota, que concluirá entre finales de 2010 y mediados de 2011.
"La empresa será en ese momento mucho más viable de lo que es ahora. Eso no significa que vaya a dar superávit, sobre todo si mantiene incluso después de 2011 la política de sostener Aerolíneas Argentinas como un servicio público que vuela y comunica la capital con destinos no rentables", explicó el presidente de la compañía.
A este respecto, Recalde adelantó que la dirección de la aerolínea tiene previsto reestructurar las frecuencias de los vuelos a muchos destinos para poder "reducir el déficit y garantizar la puntualidad de los vuelos".
A pesar de los problemas que Aerolíneas Argentinas atravesó en junio, debido a "un cambio en sistema operativo y cuestiones técnicas", el porcentaje de puntualidad en 2009 alcanzó una media cercana al 90%, según Recalde.
