MADRID, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
Air Comet mostró este martes su "sorpresa" ante la convocatoria de los paros indefinidos en diciembre por parte del comité de empresa de estructura y vuelo de la compañía, integrado por UGT, USO, CGT, Stavla y Sepla, por el impago de las nóminas, que en algunos casos alcanza los cuatro meses.
Fuentes de la aerolínea indicaron a Europa Press que la dirección de la compañía se mantuvo ayer una reunión de tres horas con el comité de empresa para presentar el nuevo plan de viabilidad de la aerolínea, así como trasladarles un compromiso de cara a abonar los salarios atrasados, sin que ningún sindicato se pronunciara al respecto. Por ello, reprocharon a los sindicatos que el anuncio se haya realizado a través de la prensa.
La aerolínea adeuda cerca de 16 millones de euros a la Seguridad Social, por lo que sus propietarios barajan acogerse a la línea ICO abierta por el Gobierno para respaldar al sector aéreo, y con la que prevén ingresar 20 millones de euros. Asimismo, la compañía ultima un crédito puente "de ocho dígitos" que le permita afrontar los salarios que debe a sus trabajadores, que ascienden a unos 4,7 millones de euros, y le "aporte liquidez", según fuentes de Air Comet.
El comité de empresa de estructura y vuelo de Air Comet convocó hoy a los 640 trabajadores de la aerolínea a una huelga del 1 al 4 de diciembre, que tendrá carácter indefinido desde el día 8, con un paro semanal de martes a viernes, ante el "incumplimiento sistemático" por parte de la empresa de abonar hasta cuatro nóminas "a la mayoría de la plantilla".
Según los sindicatos, Air Comet, propiedad del presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, y su socio Gonzalo Pascual, adeuda a los trabajadores las nóminas de los meses de julio, agosto, octubre y la paga extra de verano a "la mayoría de la plantilla", además del salario de junio pendiente para muchos empleados.
Desde el Sepla se lamentó los "posibles perjuicios ocasionados" por esta medida, consecuencia de la "dramática situación" que atraviesan los empleados de Air Comet, y se comprometió a respetar los servicios mínimos que determine la autoridad laboral.
Más de un centenar de trabajadores de Air Comet se manifestaron el pasado 26 de octubre ante la sede de la aerolínea en Madrid para protestar por el impago nóminas y denunciar la "situación crítica" en la que se encuentran. El sindicato ya adelantó que estudiaba "medidas de presión más contundentes" ante las "promesas incumplidas".
Dos días después, Díaz Ferrán afirmó que tanto él como su socio Gonzalo Pascual, estaban haciendo todo lo posible para salvar a la compañía y "regularizar" su situación, hasta el punto de que "hipotecar sus casas". Por su parte, el presidente de Marsans, Gonzalo Pascual, acusó a la banca de tener un "cerrojazo total" a la financiación del sector aéreo e instó a acabar con la "discriminación financiera" hacia Air Comet, que dijo recibe "cero financiación externa".
(EUROPA PRESS ECONOMIA)
