Baleares mantiene una "influencia destacada" del turismo extranjero en el consumo de drogas sintéticas

Actualizado: martes, 5 febrero 2008 18:08

MADRID, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -

Baleares mantiene una "influencia destacada" del turismo extranjero en el consumo de sustancias sintéticas, cuyos hábitos son más elevados en este tipo de sustancias, si bien los niveles de incautación por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad tanto en las islas como en otras zonas señaladas como destino turístico son "muy altos", según explicó hoy la delegada del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Carmen Moya.

Moyá se pronunció así a los medios de comunicación durante la presentación en Madrid de la guía gratuita informativa que ha impulsado tanto la Delegación del Gobierno, que estará disponible mañana para su difusión, en la que colaborarán todas las Comunidades Autónomas.

"Tenemos que decir que los datos de incautación de estas sustancias en zonas turísticas son muy altos y son donde posiblemente las actuaciones minoristas en los consumo de zonas de ocio, arrojan resultados más elevados", señaló la delegada del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas.

Moya destacó también que los últimos datos estadísticos que maneja su departamento muestran la incidencia de las drogas sintéticas no reside en los consumidores nacionales sino en las costumbres de consumo que incorporan los visitantes procedentes de otros países, y que "no son los que tienen los españoles".

El consumo de drogas como éxtasis líquido son "infinitamente más habituales" en este grupo, que "invierte" la tendencia "muy baja" de estas sustancias en el consumo nacional.

Al respecto, detalló que en Baleares y en las principales zonas turísticas se despliegan políticas de prevención y se trabaja intensamente con el empresariado de ocio, como muestra la renovación del segundo convenio para formar a los trabajadores e introducir materiales "simples" de disuasión e información sobre el consumo, como desplegables y autotest.

La delegada del Gobierno también aseguró que esta nueva guía se encontrará en los locales de ocio nocturno, y agregó que el consumo de sustancias estupefacientes en la población nacional del archipiélago se mueve en niveles cercanos a la media del país.

GUÍA ABIERTA A INCLUIR OTROS IDIOMAS

Sobre la repercusión de la guía en el colectivo extranjero, Moya detalló que la misma se ha elaborado en castellano, pero que las CC.AA y organismos interesados en adaptarla a las lenguas propias y en otros idiomas acordes a sus circunstancias turísticas "están abiertas a esta posibilidad".

A la presentación de la guía acudió también el secretario general de Sanidad, José Martínez Olmos, y que en cuya distribución colaboran un total de 17 instituciones, entre ellas empresas como Carrefour, Repsol YPF o la Caixa; entidades sociales como las asociaciones de padres Concapa o Ceapa; ONG y grupos científicos.

El objetivo de esta información es, indicó el responsable de Sanidad, "familiarizar" a la población sobre el problema, "ayudar a padres y madres a entender cómo se produce el fenómeno" del consumo de drogas y facilitar a los jóvenes y adultos que consumen en momentos de ocio y diversión "la información precisa para que puedan ser conscientes del riesgo que asumen al usar esas sustancias".

Por su parte Moya destacó el consumo de cocaína está protegido por el mito de que no causa daños a la salud, un pensamiento "muy común" en aquellas personas que utilizan la sustancia porque "la visualización del daño es más remota en el tiempo y para notar sus consecuencias, como afectaciones cardíacas, tiene que pasar más tiempo".

Según los datos de la Encuesta Escolar 2006-2007, este descenso ha sido especialmente significativo en el caso del cannabis y de la cocaína. La prevalencia del consumo de cannabis en los últimos 12 meses previos a la encuesta ha descendido en 6,8 puntos (29,8 por ciento, frente a 36,6 por ciento en 2004) y la de cocaína en 3,1 (4,1 por ciento frente a 7,2 por ciento en 2004).

En alcohol y tabaco, la prevalencia de consumo han descendido incluso por debajo de las registradas en 1994. El consumo habitual (últimos 30 días) de alcohol se ha reducido en los últimos dos años en más de siete puntos y el de tabaco (fumadores diarios) en más de seis.