Economía/Consumo.- La patronal de los supermercados ve "imposible" un pacto para subir los precios de los alimentos

Actualizado: jueves, 22 noviembre 2007 14:46

Las empresas aseguran no estar preocupadas por un descenso del consumo en Navidad


MADRID, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -

La patronal de los supermercados aseguró hoy que es "imposible" que operadores del sector alimentario hayan sellado un pacto para subir los precios de productos básicos aprovechando el encarecimiento de las materias primas, y destacó que estos establecimientos reducen sus márgenes comerciales para amortiguar y retrasar el traslado del alza de costes al consumidor.

"Los pactos de precios al alza no son posibles en el sector alimentario porque lo impide la competencia entre las diferentes empresas y formatos comerciales", aseveró en rueda de prensa el director general de la Asociación Española de Cadenas de Distribución, Autoservicios y Supermercados (Asedas), Ignacio García Magarzo.

De esta forma aludía a las declaraciones de la ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación, Elena Espinosa, sobre que las investigaciones que lleva a cabo la Comisión Nacional de la Competencia (CNC) ante la subida de la cesta de la compra apunta a la existencia de un pacto para subir los precios en detrimento del interés de los consumidores.

Los supermercados trasladan la subida de precios de las materias primas de forma "justificada" y "lo menos posible" al precio final de los productos en los lineales de los establecimientos, para lo que reducen sus márgenes comerciales, dijo Magarzo, sin precisar la magnitud de este esfuerzo económico.

Según el portavoz de la patronal "la distribución española está actuando adecuadamente, desempeña un papel que ayuda a contener la subida de precios" de los alimentos provocada por el alza de cereales y petróleo en los mercados internacionales, los movimientos especulativos de algunos almacenistas y la estructura de la Política Agraria Común (PAC).

Cuando suben los precios en el campo, la distribución opta por reducir sus márgenes debido a la fuerte rivalidad que impera en el comercio en España, donde la libre competencia está más garantizada que en otros países europeos en los que la presencia de formatos es menos equilibrada, como Suecia, argumentó.

Los precios de la alimentación en España "son los más bajos de la UE", y los españoles presentan una capacidad de renta superior a los precios actuales, según Magarzo, que empleó referencias de 2006 en su alegato.

El responsable de la patronal que representa los intereses de Mercadona, Dinosol, El Arbol, Ahorramás y Condis, entre otras cadenas de distribución, estimó que en materia de precios, la competencia en España "resiste la comparación con cualquier país de la UE".

Indicó además que la subida de los cereales en los mercados internacionales ha empezado a remitir, según datos del Ministerio de Agricultura, lo que apunta a una bajada de productos básicos, aunque algunos, como la carne, tardan más en absorber los efectos de los costes por su mayor periodo de elaboración.

En este sentido, Magarzo aventuró que los supermercados no están preocupados por una eventual detracción del consumo en Navidad, si bien matizó que no tiene previsiones sobre el comportamiento de las ventas a finales de año, el periodo más importante para la facturación de las cadenas de distribución.

HORARIOS COMERCIALES.

En cuanto a las declaraciones del presidente de la CNC, Luis Berenguer, que vinculó la liberalización de horarios comerciales con la bajada de precios de los alimentos, Magarzo rechazó que existan indicadores que sostengan esta hipótesis.

Especificó que la evolución de precios por comunidades autónomas demuestra que no existe relación entre la mayor contención de precios y la liberalización de horarios, para lo que puso de ejemplo la Comunidad de Madrid, con 20 festivos anuales.

A su parecer, prolongar los horarios supone un mayor aumento de costes aparejado al esfuerzo laboral sin que la demanda de los consumidores crezca por disponer de más tiempo para hacer la compra. "Si suben los costes y no las ventas, salvo que se reduzcan los márgenes, lo lógico es que los precios suban", arguyó.