Economía/Empresas.- ArcelorMittal aplazará sus inversiones y adaptará su producción en España a la menor demanda

Actualizado: jueves, 13 noviembre 2008 16:34

MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -

ArcelorMittal aplazará el calendario de inversiones previsto para el ejercicio, a la vez que ajustará la producción de sus plantas españolas a la menor demanda actual, con el fin de adaptarse a la situación de mercado y aprovechar oportunidades de negocio, informó hoy Gonzalo Urquijo, miembro de la dirección general de la compañía.

"Se cambia el calendario porque por una parte se quiere tener una solidez en el balance que permita aprovechar las oportunidades de mercado, y por otra no es el mejor momento para acelerar esas inversiones", manifestó Urquijo, en un evento con los medios.

El directivo mencionó la necesidad de ajustar la producción de sus fábricas en España a la demanda real del mercado, aunque no precisó si esta medida revertiría en un recorte de plantillas.

"Por el momento hemos reducido las subcontratas y los trabajos temporales. En función de la situación del mercado en los próximos meses decidiremos si es necesario llevar a cabo nuevas medidas", manifestó.

La compañía había fijado un plan de inversión del orden de los 7.000 millones de dólares (5.593 millones de euros) para todo el ejercicio. De esta cifra ya se han realizados inversiones por 4.000 millones de dólares (3.196 millones de euros) y las previsiones para el último trimestre están en los 1.500 millones de dólares (1.198 millones de euros), con lo que otros 1.500 millones quedarían pospuestos.

Asimismo el directivo señaló que para adaptar la producción a la demanda actual en el sector llevarán a cabo una reducción de costes de 4.000 millones de dólares (3.196 millones de euros) en cinco años y de unos 1.000 millones de dólares (799.178 euros) en gastos generales. Estos planes de reducción de costes hasta el momento se han traducido en un recorte de unos 1.000 trabajadores externos y temporales.

En cuanto a la posición financiera del grupo, Urquijo --que cifró el nivel de endeudamiento en 1,2 veces su Ebitda-- señaló que la compañía ha optado por una política de cautela, por lo que prevén reducir su endeudamiento en unos 10.000 millones de dólares (7.987 millones de euros) hasta finales de 2009.

"Esto se logrará a través de una reducción del fondo de maniobra, contención de inversiones y generación de ingresos", explicó el directivo.

CRISIS EN EL SECTOR DE LA CONSTRUCCIÓN Y DE LA AUTOMOCIÓN

La compañía prevé cerrar el cuarto trimestre del año con un resultado bruto de explotación (Ebitda) de entre 2.500 y 3.000 millones de dólares (1.997 y 2.397 millones de euros). Un recorte "muy significativo", reconoció Urquijo, con respecto al cierre del tercer trimestre del año que se situó en los 8.600 millones de dólares (6.871 millones de euros).

Urquijo explicó que esta reducción se debe a la crisis de liquidez y a una bajada de la demanda a consecuencia, esto último, a una reducción de existencias en toda la cadena de valor y una disminución en los precios de la materia prima.

"En España, además de la crisis de liquidez, hay que añadir la situación difícil que viven sectores como el de la automoción y el de la construcción, que provocan caídas de la demanda reseñables", matizó.

El retroceso en la demanda se ha reflejado en una disminución importante en la producción para el cuarto trimestre, del orden del 35% para planos de Carbón en América y del 30% en Europa, mientras que en producción de largos el recorte se situaba en torno al 30%, tanto en Europa como en el continente americano.

CONTRATOS CON COMPAÑÍAS ELÉCTRICAS

Urquijo dijo que en este momento hay unas líneas de dialogo abiertas con el Gobierno, pero "nada en concreto", y aclaró que la energía les cuesta un 70% más, lo que repercute en la producción de algunas de sus plantas.

"Con menores costes nuestras fábricas, sobre todo en largo, habrían podido fabricar más para la exportación. Por lo que esto (los costes en energía) ha tenido una repercusión en la parada de las plantas", indicó Urquijo, que mostró su asombro por el hecho de haber llegado a acuerdos con compañías extranjeras, pero con ninguna en España.