Damm espera elevar sus ventas a 1.000 millones en 2016 y poner el acento en la internacionalización

Fábrica de Damm en El Prat de Llobregat
DAMM
Actualizado: martes, 7 junio 2011 14:37

El modelo "ideal" sería crecer a partir de adquisiciones de plantas en buenas condiciones


BARCELONA, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -

El grupo cervecero Damm ha empezado a trabajar en un nuevo plan estratégico 2012-2016, con marcado acento en la internacionalización, según ha avanzado el presidente de la compañía, Demetrio Carceller, que espera para entonces elevar a 1.000 millones la cifra de negocio.

La actividad de Damm en el extranjero supone ahora un 10% --principalmente Portugal, Estados Unidos e Inglaterra--, mientras que las ventas en mercados internacionales suponen un 4% de la facturación total.

"El futuro está fuera, no dentro", ha señalado, tras reconocer que llegan algo tarde, en un encuentro con medios con motivo de la junta general de accionistas que se celebra en Barcelona.

Para Carceller, el modelo ideal de internacionalización sería a partir de adquisiciones de fábricas en buenas condiciones, como ha sido el caso de la fábrica de Santarem (Portugal), una opción que Damm busca desde hace cuatro años, pero que nunca ha vuelto a encontrar.

Además, la multinacional catalana ostenta una participación del 17% en el importador cervecero estadounidense United States Beverage (USB), y Carceller ha avanzado que la intención es alcanzar el 25% para apoyar el desarrollo de sus marcas.

El Grupo prevé cerrar este trimestre con cifras similares a las registradas entre abril y junio de 2010, y también cerrar 2011 con unos beneficios parecidos a los del año pasado y que alcanzaban los 68,8 millones de euros a pesar del incremento de los costes.

Ahora, Damm ostenta una cuota de mercado español en el sector de la cerveza de un 25%, mientras que en el mercado de agua la cuota alcanza un 7,9% a cierre de 2010.

En 2010, el grupo cervecero obtuvo un beneficio de 68,8 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 10,5% respecto a 2009.

La facturación ascendió a los 790 millones de euros, un 1% más que en 2009, lo que el grupo consideró "satisfactorio" por la coyuntura de crisis, en la que el consumo bajó.

El Ebitda creció un 3,1%, alcanzando los 184 millones a causa de la reducción de los costes de materias primas y aprovisionamientos, el aumento de la productividad, la mejora de los costes logísticos y la eficiencia de las ventas.