LONDRES, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Alto Tribunal británico ha desestimado la acción judicial presentada por el sindicato Unite en contra del recorte de gastos introducido el pasado año por la aerolínea British Airways (BA), según publicó hoy la prensa local.
Unite alegaba que las medidas aprobadas por BA no fueron convenientemente consultadas con los trabajadores, e imponían la congelación salarial y la reducción de personal en las rutas de larga distancia.
Debido a ello, el sindicato convocó una huelga durante las pasadas navidades, que finalmente fue suspendida por el Alto Tribunal en otra sentencia independiente. Sin embargo, Unite ha iniciado un nuevo periodo de consulta con los trabajadores para plantear futuras movilizaciones, cuyo resultado se conocerá el próximo lunes.
Representantes de BA se mostraron "extremadamente satisfechos" ante la decisión adoptada hoy por el juzgado británico, dado que la acción pretendía revocar las medidas que implantaron "a pesar del severo impacto financiero que ello hubiese tenido en la compañía, en el contexto de un segundo ejercicio de pérdidas récord anuales".
Además, señaló que dado que Unite acudió a los tribunales "debería reflexionar sobre la sentencia que ha obtenido, en lugar de imponer una huelga innecesaria en el transporte público".
Sin embargo, el secretario general adjunto de Unite, Len McCluskey, afirmó que las movilizaciones siguen siendo "una posibilidad", dado que "esta desafortunada sentencia no afecta en absoluto a los aspectos centrales de su disputa con BA".
Las medidas aprobadas el pasado mes de noviembre por la aerolínea suponen una congelación salarial de dos años a partir de 2010 y la reducción de 15 a 14 tripulantes en los vuelos de larga distancia, lo que según el sindicato afectaría tanto al servicio prestado a los pasajeros como a los ingresos de los empleados.
British Airways, en pleno proceso de fusión con Iberia, registró en los nueve primeros meses de su ejercicio fiscal, que finalizó el pasado 31 diciembre de 2009, pérdidas operativas por valor de 86 millones de libras esterlinas (98 millones de euros), frente a beneficios de 89 millones de libras (102 millones de euros) en el mismo periodo del año precedente.
