MADRID 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
La industria alimentaria podría llegar a invertir en el sector 1.000 millones de euros en el año 2009 y un total de 3.000 millones durante los próximos tres años si el Gobierno le concede apoyo financiero a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO).
Así lo indicó hoy el secretario general de la Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas (FIAB), Jorge Jordana, quien reclamó lineas de apoyo del ICO para facilitar la inversión de obra nueva en la industria alimentaria. "Nuestro sector tiene menos problemas que los demás, pero los tiene. Si invertimos en la industria alimentaria tendremos un futuro mejor para el sector", aseguró Jordana, quien avanzó que está pendiente de una reunión con responsables del ICO.
El secretario general de la FIAB explicó que se trata de un sector que empieza a ser visible, ya que es uno de los pocos que ha mantenido el Índice de Producción Industrial positivo (0,3), "en un periodo de noticias económicas terribles".
Prueba de ello, afirmó, son datos como que el sector supera ya los 80.000 millones de euros de producción y es una industria generadora de empleo, ya que en el primer trimestre de 2008 contaba con 448.000 ocupados, mientras que en el tercer trimestre contaba con dos mil más, llegando a los 450.000 trabajadores.
Dentro de este plan de proyección y coordinación conjunto, que la FIAB pedirá al Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, con el fin de impulsar la industria alimentaria en un futuro, Jordana destacó la importancia de tener un sistema agroalimentario competitivo, por lo que insistió en la necesidad de invertir en I+D+i.
En este sentido, confió en que el departamento que dirige Elena Espinosa junto con el Ministerio de Ciencia e Innovación apoyen al sector para poder comenzar a realizar varios proyectos, ya que "la industria alimentaria es una de las plataformas más eficaces que hay en España".
También solicitó la continuidad de cursos de formación que el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino comenzó a gestionar desde hace un año, con el fin de que no decaigan y al mismo tiempo proliferen.
Asimismo, reclamó la simplificación administrativa, es decir, una aplicación racional de las normas que no obligue a tener una regla para cada Comunidad Autónoma, al tiempo que pidió que exista coordinación en el apartado de promoción.
"Pese al contexto económico actual, el sector alimentario goza de una estabilidad envidiable en el mercado interno, erigiéndose como una de las claves para diversificar la economía contando con la suficiente fortaleza y voluntad de liderazgo como para situarse como puntal estratégico de la economía nacional", concluyó.