MADRID, 18 Ago. (EUROPA PRESS) -
La decisión del Tribunal Arbitral de París de fallar en contra de Gas Natural en el conflicto sobre los contratos de suministro de gas a través del gasoducto Magreb-Europa con la argelina Sonatrach podría tener un coste para la gasista española de unos 1.100 millones de euros, según un informe de UBS.
Además, el banco de inversión considera que si la decisión implica el abastecimiento futuro, este encarecimiento podría suponer un coste adicional anual de unos 300 millones de euros.
De esta manera, UBS, que apunta un posible recorte del beneficio por acción de la gasista del 14% para el periodo 2011-2013, cree que la política de dividendo podría estar en riesgo, y empeoraría el perfil de deuda de la compañía.
Los títulos de Gas Natural mantenían en el día de hoy su tendencia a la baja en la Bolsa. Así, caían un 0,58% a las 13.06 horas, hasta los 12,03 euros.
Gas Natural contaba a finales de 2009 con unas provisiones corrientes y no corrientes por un total de 1.364 millones de euros, un 93,4% más que en el ejercicio anterior, según consta en el informe anual de la compañía.
El laudo del tribunal arbitral internacional reconoce el derecho de Sonatrach a un incremento de precio a partir de 2007 en el conflicto que mantenía con Gas Natural Fenosa sobre los contratos de suministro de gas a través del gasoducto Magreb-Europa.
Gas Natural Fenosa señaló que está analizando el contenido de la resolución arbitral, "con la que discrepa, para valorarla detalladamente y determinar las actuaciones que procedan en defensa de sus derechos".
La gasista precisó que el nuevo precio no es definitivo, ya que "contractualmente está sujeto a otras revisiones para adaptarlo a las condiciones de mercado".
Gas Natural Fenosa añadió que, a los efectos de las cantidades determinadas en el laudo por suministros ya realizados, podría, en su caso, "atenderlas con la repercusión aplicable a determinados clientes, así como con las provisiones realizadas durante los años del conflicto".
Los contratos de suministro de gas que recibe de Argelia a través del gasoducto Magreb-Europa suponen una cuarta parte del gas consumido en España, y durante el periodo revisado el mercado doméstico a tarifa estuvo atendido con dicho gas.
