BARCELONA, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
El consejero-delegado de la empresa de cobre La Farga Group, Oriol Guixà, reclama que las organizaciones empresariales sean dirigidas por empresarios, ya que asegura que la mayor parte de las patronales españolas están lideradas por personas que no lo son y que solo "defienden la poltrona".
"Una de las funciones que tenemos que hacer los empresarios es coger las maletas e ir a dirigir los órganos de gobierno de todas las instituciones de representación empresarial, porque si no nos hacemos cargo los empresarios, nos hundirán", ha manifestado este miércoles durante una mesa redonda en el VI Foro FemCat en la sede de Banco Sabadell en Barcelona.
Asimismo, ha criticado que haya más de una organización: "¿Por qué hay tantas? Solo necesitamos una", y se ha mostrado preocupado por las políticas industriales y empresariales que está impulsando el Gobierno español, ya que ha considerado que no tienen nada que ver con el tejido empresarial de Cataluña.
DIFERENCIAL DE CATALUÑA
Ha asegurado que el Gobierno español "no puede defender los intereses industriales y empresariales de Cataluña" porque, a su juicio, la red industrial que tiene Cataluña no la tiene ninguna otra parte de España.
"Lo que se está planteando es una definición de los intereses de las grandes corporaciones de Madrid, que hacen un planteamiento económico muy diferente al tejido empresarial catalán", ha reiterado, y ha pedido una protección de la industria y las empresas catalanas.
Asimismo, ha lamentado que la legislación laboral en España parte de un error: "Pretende proteger al teórico débil, el trabajador, frente al teórico potente, la empresa; pero no nos hemos dado cuenta como sociedad de que hoy el débil es la empresa y no el trabajador".
NUEVOS MERCADOS
La Farga Group facturó 1.300 millones de euros en 2011, aunque Guixà ha destacado que el beneficio se redujo a unos 20 millones antes de impuestos, ya que el margen es muy limitado debido a que el producto de negocio es materia prima.
Guixà ha explicado que en 2007 la compañía consideró que en Cataluña no había más opción de crecer, por lo que se lanzó a implantarse en otros países a través, principalmente, de la transmisión de conocimiento y de gestión.
El primer país donde exportó fue China, donde tiene una planta productiva de cables para el sector ferroviario, y posteriormente se implantó en Estados Unidos, con una inversión de 50 millones de dólares en una planta de producción de materia prima para hacer cable.
Guixà ha explicado que en los últimos meses la compañía ha cerrado una operación con un socio ruso para la transferencia de conocimiento, sin hacer ninguna inversión, y ha avanzado que está ultimando una operación en el mismo sentido con un socio de Latinoamérica, aunque no ha dado más detalles.