MADRID 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
El diputado de IU en el Congreso, Gaspar Llamazares, quiere que el Congreso vote la compra de acciones públicas en Repsol como única garantía "frente a tiburones" como la rusa Lukoil, que en momentos de crisis pretenden hacerse con el control del 30% de la empresa española.
Por ello, ha registrado una proposición no de ley en la Cámara Baja con la insta al Gobierno a definir la política de privatizaciones de sectores estratégicos, como el energético, y a "no despreciar" el fortalecimiento de la participación pública en los mismos ante situaciones de vulnerabilidad, como es el caso de la petrolera hispano-argentina.
Con esta iniciativa, que lleva la firma también del diputado de ICV en la Cámara Baja, Joan Herrera, ambos partidos pretenden mostrar su desacuerdo con "la pérdida de caracter español" que, a su juicio, sufre Repsol.
Y, en este contexto, Llamazares se dijo "preocupado" de que tanto el Gobierno como el PP estén "en un juego de pelota que no lleva a ninguna parte" eludiendo su "corresponsabilidad" con respecto a la privatización de las empresas públicas, lo que, en su opinión, ha provocado la situación de "fragilidad" en la que se encuentra actualmente la citada empresa.
EL MUNDO AL REVÉS.
"Estamos atrapados entre el oportunismo del PP, que ahora se convierte al intervencionismo, y la pasividad del Gobierno, que ahora se convierte al liberalismo", puso de manifiesto el diputado de IU. "El mundo al revés", acotó.
En este sentido, Llamazares acusó a ambas formaciones de ser las responsables de "la pérdida de españolidad" de Repsol, tras el "sucedáneo" de la política de privatización que sus respectivos gobiernos han aplicado, y del peligro de que el país termine perdiendo empresas que poseen carácter propio y que tienen sus centros de investigación en España.
"Quien han privatizado las empresas públicas, no puede hoy lamentar la compra de las mismas por parte de compañías extranjeras, y quien mira para otro lado, no ejerce como gobierno", sostuvo Llamazares. "Hoy no es momento de mirar para otro lado --insistió--, sino de intervenir en defensa de esas empresas y, sobre todo, los intereses generales"
Así las cosas, el diputado de la coalición de izquierdas urgió al Ejecutivo socialista a poner fin a una estrategia que se ha demostrado "fracasada" evitando buscar núcleos de control privados entre los bancos y las empresas constructoras porque, a su entender, eso supondría "un parche".
LOS INTERESES GENERALES, EN PELIGRO.
A su juicio, la solución pasa por la participación pública en esas empresas estratégicas para garantizar así su españolidad y su vinculación con los intereses generales, que Llamazares aprecia que actualmente están "en peligro".
En este punto, discrepó con las declaraciones efectuadas por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de que "no es intervencionista" y que no prevé la participación pública en Repsol. "Sin intervencionismo y sin participación pública, la petrolera estará en manos del mejor postor internacional", lo que acabará por "debilitar" un sector estratégico en España y, por ende, la economía del país, evidenció Llamazares.
Por todo ello, el ex líder de IU recordó al Gobierno que el futuro de Repsol "no es una cuestión menor", le subrayó que, con su actuación, se "juega su credibilidad" y le propuso una serie de medidas que hagan prevalecer los intereses generales en sectores estratégicos, entre las que sugiere una revisión de la legislación del sector de hidrocarburos.