Economía/Motor.- Unos 400 trabajadores de Roca se manifiestan en Barcelona en contra de los 431 despidos en Gavà

Actualizado: jueves, 22 octubre 2009 17:26

Las posturas de empresa y sindicatos siguen alejadas y se agota la segunda prórroga para negociar

BARCELONA, 22 Oct. (EUROPA PRESS) -

Unos 400 trabajadores de Roca, según cifras de la Guardia Urbana, recorrieron hoy el centro de Barcelona en protesta por el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que plantea el despido de 431 empleados de la planta de Gavà, casi la mitad de la plantilla, así como de 180 personas en cada una de las plantas de Alcalá de Guadaira (Sevilla) y Alcalá de Henares (Madrid).

Los trabajadores cortaron la avenida Diagonal y se concentraron frente a la sede de la empresa para expresar su rechazo a los despidos y reivindicar que el ajuste en la plantilla se haga mediante prejubilaciones, bajas incentivadas y otras medidas no traumáticas.

En la mesa de negociación del ERE en Madrid las posturas continúan muy alejadas, según explicaron a Europa Press fuentes sindicales, que recordaron que la próxima semana se agota la segunda prórroga para negociar y ya se está tramitando la solicitud para una tercera.

"Todos estamos muy al límite", reconocieron, ya que las conversaciones pivotan alrededor de la necesidad que aduce la empresa de reducir su plantilla en 713 personas en España fruto de la crisis en la construcción.

Los sindicatos exigen a Roca que garantice la continuidad y estabilidad de los tres centros de trabajo.

La multinacional catalana respondió a las demandas de planes de viabilidad expresadas por algunos alcaldes de las poblaciones donde se ubican las factorías, y aseguró que el expediente responde precisamente a la voluntad de Roca de adecuar sus plantillas a la actividad actual y prevista para el futuro, ya que recordó que la crisis en el sector "se prevé larga".

Fuentes de la empresa explicaron a Europa Press que la empresa "no se está ensañando con España", sino que ha tenido que acometer reestructuraciones en todos los países en los que las perspectivas y la actividad están igual de perjudicadas.

"Hemos cerrado una planta en Bulgaria y otra en Portugal; una planta en Rumanía trabaja al 33% de su capacidad, mientras que las españolas están alrededor del 50%", afirmaron.