En las lonjas viguesas se vendieron hoy 36 toneladas de pescado, 22 menos que ayer
VIGO, 27 Jun. (EUROPA PRESS) -
La flota viguesa de altura, asociada a la Cooperativa de Armadores, ha vuelto a faenar hoy --fueron tres los barcos de Gran Sol (además de otros de palangre) que abandonaron el amarre-- después de casi un mes de paro, según confirmó en declaraciones a los medios el director gerente de la Cooperativa, José Antonio Suárez Llanos.
Suárez Llanos explicó que algunos barcos ya partieron de puerto en las últimas horas y que, a lo largo de los próximos días, lo seguirán haciendo las flotas de palangre y los buques que faenan en el Gran Sol, una vez que las tripulaciones se han aprovisionado de los víveres y material necesario para hacerse a la mar.
El responsable de la Cooperativa señaló que la flota volverá a la actividad de forma paulatina y escalonada "porque si lo hacen todos los barcos a la vez se puede saturar el mercado", y apuntó que, durante las casi cuatro semanas que duró el amarre, se ha dejado de vender en las lonjas de Vigo, sólo en pescado fresco, más de 10 millones de euros.
No obstante, Suárez Llanos hizo una valoración "positiva" de las movilizaciones porque "ahora hay una negociación abierta y la posibilidad de seguir en contacto".
Además, recordó que la posición del sector fue "unitaria" y "se dio un toque de atención a las administraciones, sobre todo a la UE", a pesar de las autoridades europeas "siguen siendo insensibles" porque, según afirmó, "los países del Norte no tienen flotas importantes y les da igual lo que pase".
El directivo de la Cooperativa de Armadores reconoció que la UE "movió ficha" y expresó su esperanza de que las demandas del sector pesquero tengan su reflejo en el Consejo de Ministros de la UE del próximo mes. "Por lo menos se les ha concienciado de que hay un grave problema social y económico", añadió.
DESCARGAS.
Por otra parte, en el Puerto de Vigo se vendieron hoy 36 toneladas de pescado, 22 toneladas menos que las vendidas ayer. Así, descargaron cinco bakas locales y, en la lonja de bajura, se vendieron mil kilos de sardina, 1.500 kilos de jurel, y mil kilos de chinchos.
En la lonja de litoral, se vendieron 8.000 kilos de rincha, y en la lonja de mariscos, se comercializaron 4.497 kilos de las diferentes variedades de almejas. El resto de ventas, 24,5 toneladas, se corresponden con descargas de altura y con el pescado de importación que llegó en camiones.
