La compañía descarta que se forme un tapón en Son Sant Joan pero incrementa las plazas en los vuelos entre Mallorca y la Península
PALMA DE MALLORCA, 30 Jun. (EUROPA PRESS) -
La fuerte demanda turística que registra el mercado alemán hacia Baleares tiene como consecuencia que se limite la llegada de visitantes a otros destinos nacionales, a causa del 'hub' --centro de interconexión de vuelos-- de la aerolínea de bajo coste germana Air Berlin en el aeropuerto de Son Sant Joan (Mallorca), según la Oficina de Turismo de España en Berlín.
Este organismo, dependiente de Turespaña, advierte en su último estudio de coyuntura que los destinos peninsulares sufrirán el efecto negativo del auge de la demanda balear, a causa de ese problema de comunicaciones y de la circunstancia de que muchos pasajeros reservaron con antelación los billetes correspondientes al tramo Alemania-Mallorca.
Por su parte, el responsable de la aerolínea para España y Portugal, Álvaro Middelman, descartó, en declaraciones a Europa Press, que se forme un tapón en Mallorca, al existir una cantidad "suficiente" de conexiones aéreas directas con aeropuertos peninsulares como Málaga y Alicante, entre otros.
Sin embargo, Middelman admitió la "descompensación" en la disponibilidad de tránsitos entre la isla y la Península (así como hacia Portugal) y aseguró que solucionan la situación "con un incremento importante de plazas" en los vuelos entre Mallorca y la Península, lo cual contribuye a estimular el mercado turístico nacional.
Según el responsable de Air Berlin, un 50% de los vuelos de la compañía tiene como destino final Palma de Mallorca, con lo cual, en ese caso no se produce ningún problema de tránsitos, mientras que el resto son tránsitos en un sentido u otro.
RECUPERACIÓN GENERALIZADA
Además de las ya conocidas recuperaciones de los mercados británicos y alemán, el informe de la Oficina de Turismo de España, destaca la recuperación de la afluencia de visitantes hacia Baleares procedentes de países emisores como Austria, Bélgica, Dinamarca, Suecia, Finlandia, Noruega, Países Bajos y Suiza, donde en casi todos los casos las islas se sitúan como segundo destino español más solicitado.
A todos ellos cabe sumar el repunte registrado en emisores emergentes como Polonia, República Checa o Hungría, a los que se añade Rusia, donde las reservas hacia Baleares aumentaban, a finales del pasado mes de abril, un 32% respecto al año anterior, superando con creces a Cataluña, con un 16%, y a la Costa del Sol, con un 15%.
