Túnez, Marruecos, Egipto y Centroeuropa son los destinos preferidos por los españoles para sus vacaciones fuera de la Península
MADRID, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Federación Española de Asociaciones de Agencias de Viajes (FEAAV), Jesús Martínez Millán, aseguró hoy que la venta de viajes turísticos continúa creciendo, como ya sucedió el verano anterior, e indicó que para esta Semana Santa se prevé "un crecimiento suave" de las ventas en torno a un 3% o un 4% respecto al año pasado.
Según señaló Martínez en declaraciones a Europa Press Televisión, un crecimiento de un 3% o un 4% no es "nada despreciable" si se tiene en cuenta el número total de viajes que se realizan en estas fechas. "Al final, son muchos viajes adicionales los que se hacen con respecto al año pasado", indicó.
Para el presidente de FEAAV, esta "pujanza creciente" del mercado responde a dos motivos fundamentales: a que "viajar es más barato" ahora que antes y a que "la gente tiene más dinero", ya que, en su opinión, "la economía del español medio va mejorando y su deseo de viajar es creciente".
"No hace falta ser millonario; hay un viaje para cualquier bolsillo. Es cuestión de querer, por 100, 200 ó 300 euros te vas hoy a muchísimo sitios, y más teniendo en cuenta que España es un país riquísimo que ofrece muchas posibilidades" para hacer turismo, opinó.
LA TENDENCIA: QUEDARSE EN ESPAÑA.
En cuanto a los destinos favoritos de los españoles para pasar sus vacaciones, Martínez aseguró que "la tendencia generalizada", al igual que viene ocurriendo otros años, es viajar dentro de la Península. "La gente no se va al otro lado del mundo si dispone de cuatro días", añadió.
En esta misma línea, apuntó que los que se deciden a salir de la Península lo hacen a destinos donde pueden llegar en avión en dos o tres horas, como Centroeuropa, Egipto, Turquía, Túnez o Marruecos debido a que "la disponibilidad de tiempo es muy limitada".
Destinos internacionales, en general, que, según comentó Martínez, cada vez tienen menos que ver con las tradicionales procesiones y el turismo "religioso". "La Semana Santa se ha convertido en un fenómeno más cultural y de ocio que otra cosa", dijo.
"Habrá quien todavía vaya con una vocación religiosa a ver la Semana Santa a Logroño, pero cada vez más gente, además de ver la procesión, va a ver las bodegas", concluyó.
