MADRID 18 Nov. (EUROPA PRESS) -
La inteligencia artificial agéntica se posiciona como la gran ola de transformación a la que se enfrenta el tejido productivo español. Las compañías que deseen aprovechar realmente el valor añadido que esta tecnología ofrece, deben ser rápidas en su adopción, transformar sus modos de trabajo apostando por la convivencia entre personas y agentes, operar bajo principios éticos claros, formar a sus empleados y contar con el respaldo firme de la alta dirección.
Así lo han puesto de relieve varios referentes del sector empresarial y tecnológico en el último episodio del podcast Generación de Oportunidades, impulsado por Europa Press junto a McKinsey & Company. Los riesgos y oportunidades de la IA, su impacto transversal y la exigencia de capacidades técnicas y éticas han centrado el análisis de directivos de BBVA, Mapfre, Repsol, Merlin Properties y Esade.
Todos ellos coinciden en que la clave pasa por anticiparse, innovar y adaptar la cultura corporativa a un contexto donde personas y agentes inteligentes convivirán en los procesos.
El socio de McKinsey y líder de Quantum Black Iberia, Carlos Fernández, apeló a la urgencia de "subirse a la ola", pues "no hay ningún sector que no vaya a verse impactado por la IA".
El responsable global de BBVA AI Factory, Ignacio Teulón, reforzó este mensaje al apuntar que "el futuro es ayer" y reclamó agilidad y estructuras preparadas para aprender a ritmo acelerado. Por su parte, el lead expert del Centro de IA de Mapfre, Mario Encinar, situó el foco en la gobernanza ética y en el papel de la dirección para pilotar una transición donde los agentes ya no solo generan información, sino que empiezan a actuar en los procesos internos y de atención al cliente.
La subdirectora del Centro de IA Generativa de Repsol, María Ángeles Arroyo, remarcó la importancia de la alta dirección para impulsar la transformación de procesos y convertir los proyectos piloto en avances integrados en toda la organización.
Así, el director de Tecnología de Merlin Properties, Álvaro Ontañón, defendió la necesidad de salir de la zona de confort y experimentar en lo tecnológico para no quedarse atrás; mientras el directivo de Esade Madrid, Carlos Pelegrín, recalcó el déficit de capacidades en los órganos de gobierno y la necesidad de poner la IA en el centro de la estrategia empresarial.
EVOLUCIONAR DE HERRAMIENTAS GENERATIVAS A AGENTES
En este escenario, aseguraban que la aplicación práctica de la IA agéntica ya es una realidad para muchas compañías. Teulón relató cómo la entidad está volcada en pilotar soluciones con IA generativa para mejorar la relación con los clientes y garantizar la disponibilidad y riqueza de los datos procesados en tiempo real, generando valor en los distintos dominios del negocio; Encinar señaló que el reto es evolucionar de herramientas generativas a agentes que actúan de forma responsable, enfatizando la creación de marcos de gobernanza claros y el uso en asistentes de productividad y call centers.
Asimismo, la representante de Repsol desglosó el enfoque de la energética, que ha creado el primer centro de competencia en IA generativa del sector energético europeo y apuesta por sistematizar procesos para extraer valor y cumplir objetivos de descarbonización, siempre con patrocinio desde el consejo y el comité ejecutivo.
Desde Merlin Properties, Ontañón detalló el trabajo en la eficiencia de edificios y operaciones, probando nuevas funciones con la IA y preparándose para una infraestructura digital más avanzada.
Por parte de Esade, Pelegrín recalcó que la mayor aportación académica es ayudar a reducir la resistencia al cambio en los consejos directivos, así como dotar de visión estratégica ante el reto de la nueva tecnología en la formación y la gobernanza empresarial.
De cara a los próximos años, los participantes del encuentro coinciden en la necesidad de trazar una hoja de ruta clara y transversal, que garantice la formación continua y el compromiso ético tanto de directivos como de empleados.